La CUP reta "a los que temen a una inhabilitación" a dar "un paso al lado"

Ritmo. Más ritmo. La CUP ha intentado este viernes espolear al Govern de Junts pel Sí para que, de una vez por todas, armen el referéndum de autodeterminación. “Ya no es tiempo de compromisos con el referéndum. Es momento de poner en marcha el referéndum”, ha dicho la diputada Anna Gabriel. “No puede ser que estemos encallados en la logística” de la consulta vinculante, ha sentenciado.  Su antecesora en el atril ubicado en la plaza del Sol, en el barrio de Gràcia, en el primer acto de la campaña ‘Referéndum Sí o Sí’, la integrante de la dirección de la CUP Núria Gibert ha dado entender otro motivo por el que no hay avance en cuanto a la  consulta: “Aquellos que tengan miedo a una inhabilitación, que hagan un paso al lado [en irónica referencia a la marcha de Artur Mas] o un paso atrás, pero que nos dejen a nosotros”. Finalmente, la propia Gabriel se ha apuntado a este reto y ha afirmado que : “Si ellos hacen un paso al lado, nosotros avanzaremos hacia la República Catalana”.

“Pongamos fecha; fijemos pregunta; compremos urnas; imprimamos papeletas y arranquemos las campañas del ‘sí’ y del ’no’” ha llamado Gabriel quien ha reiterado que no hay otra opción que el referéndum. “No hay plan B, no avalaremos nada que no sea un referéndum, tampoco unas elecciones sustitutivas. El referéndum es un compromiso con el pueblo de Catalunya” .

DESOBEDIENCIA O DESOBEDIENCIA

Gabriel ha abordado también otro de los ‘greatest hits’ de los anticapitalistas, la desobediencia. En un esfuerzo pedagógico, pensado más en aquellos que no estaban en Gràcia, feudo de la CUP, que en los convencidos asistentes, la diputada ha remarcado que era “obvio” que no habría un acuerdo con el Estado para la celebración de la consulta vinculante. “Por tanto, si hay referéndum tendrá que ser desobedeciendo. O desobediencia o desobediencia” replicando en modo duro el eslogan que acuñó Carles Puigdemont en la cuestión de confianza de septiembre, el ‘referéndum o referéndum’. “La desobediencia no es un divertimento  es la respuesta lógica a la ausencia de democracia que se vive en el Estado” ha sentenciado.

Y es que la CUP no acaba (de hecho, ni comienza, ni quiere) de hacerse suyo el mantra del cambio de legalidad, entre la actual, española, y la futura, la catalana, mediante la simple promulgación de la ley de transitoriedad. “Que no haya forma legal de hacer un referéndum no quiere decir que no haya forma. Hacer un referéndum no tiene ningún misterio” ha afirmado audaz la diputada.

Referencia obligada, en forma de acuse de recibo y agradecimiento 'chandalístico' al apoyo mostrado por el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, a una independencia catalana. “Ojalá se sumen muchas más repúblicas” además de la “bolivariana” ha aseverado.