PUGNA ELECTORAL

UPD avisa de que C's puede blindar la normalización lingüística

El partido de Díez recela de la propuesta de consulta sobre el modelo educativo

XABIER BARRENA / BARCELONA

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La lucha por un mismo espacio, sobre todo en año electoral, causa situaciones paradójicas. Tómese como ejemplo el caso de Ciutadans y UPD. Con el telón andaluz de fondo, es decir, el éxito de la fuerza naranja y el fracaso y la subsiguiente crisis interna de la magenta. Los de Albert Rivera, en concreto el vicepresidente José Manuel Villegas, dijo el martes que si su fuerza vence en los comicios del 27-S impulsará una consulta popular sobre la normalización lingüística. Ciutadans quiere usar el instrumento creado por Artur Mas 'ad hoc' para el proceso soberanista para intentar infligir al nacionalismo una derrota en uno de sus pilares. El líder de UPD en CatalunyaRamón de Veciana, sin embargo quiso sacar punta por el otro extremo del lápiz: la propuesta de Ciutadans, alertó, puede blindar "definitivamente" el modelo catalán de inmersión lingüística.

Según De Veciana, no se puede proponer una consulta sobre un "derecho fundamental que no puede ser sometido a votación", como es el de la elección de la lengua en educación. Ciutadans querría preguntar a los catalanes si prefieren el actual modelo o un sistema trilingüe con el catalán, el castellano y el inglés como lenguas vehiculares.

La propuesta de C's, apuntó De Veciana en un comunicado, deja en el aire la "duda de si se trata de una mera ocurrencia de este diputado para lograr notoriedad" o si forma parte de "un plan intencionado para desarrollar el blindaje del modelo lingüístico de su asesor Luis Garicano". Todo esto sin contar, añade el líder magenta en Catalunya, con que la ley de consultas está suspendida por el Tribunal Constitucional.

CRISIS INTERNA

En clave de partido, De Veciana, miembro del consejo de dirección estatal, pidió a los que han dimitido de la ejecutiva del partido "que no lo descabecen antes de las elecciones municipales y autonómicas del 24 de mayo". Y es que, si se producen dos dimisiones más en la dirección, esta quedaría en manos de una junta gestora, lo que significaría la marcha automática de Rosa Díez. Circunstancia que aprovecha Ciutadans para lanzar un sibilino mensaje que cierra el círculo de estas escaramuzas por el mismo espacio: "Mientras Díez siga, no habrá acuerdo con UPD".