CATALUNYA

20D.- Colau defiende un referéndum para "romper muros" entre Catalunya y el resto de España

Insta al futuro Gobierno central a abordarlo "sin miedo"

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La alcaldesa de BarcelonaAda Colau (BComú), que cierra simbólicamente la candidatura de EnComúPodem, ha defendido que convocar un referéndum sobre la independencia es la única manera de "romper los muros que separan y de abrir un diálogo fraterno entre Catalunya y el resto de pueblos de España".

En el artículo 'Perder el miedo a la democracia' publicado este viernes en 'El País' ha dicho que "los gobiernos del cambio de Madrid y Barcelona" muestran que es posible reconstruir el diálogo con el resto de España.

La alcaldesa opina que el bloqueo perjudica al funcionamiento de las instituciones, y ha instado al próximo Gobierno central a abordar un referéndum sin miedo, estableciendo "los cauces legales que permitan celebrar la consulta".

Ha advertido de los costes políticos y sociales del inmovilismo porque son mucho más altos que permitir que la gente resuelva los conflictos mediante procedimientos democráticos: "No tengamos miedo a la democracia".

Sostiene que el debate territorial ya no se circunscribe a los "nacionalismos periféricos, sino que impregna la política de Estado", y agrega que las formaciones de izquierdas que concurren a los comicios quieren una reforma constitucional que implique un replanteamiento territorial.

"Tenemos que superar el bucle sin fin que bloquea el funcionamiento institucional y enrarece el debate político", ha expuesto al argumentar que Barcelona necesita que las instituciones funcionen y colaboren entre ellas.

CUESTIÓN "DEMOCRÁTICA"

Ve insostenible que el Gobierno central se escude en que un referéndum requiere una reforma constitucional previa que se niega a tramitar, y también que los partidos nacionalistas aprueben "medidas unilaterales, sistemáticamente recurridas por el Ejecutivo español".

"La celebración de un referéndum no es una cuestión nacionalista, es una cuestión democrática", porque hasta ahora el 9N y las últimas elecciones catalanas no han podido sustituir el único procedimiento democrático internacionalmente, que es el referéndum, defiende.