paso crucial en la investigación del 'caso palau'

Hacienda concluye que Millet era un eslabón entre Ferrovial y CDC

J. G. ALBALAT / Barcelona

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La Agencia Tributaria ha llegado a la conclusión de que el antiguo equipo directivo del Palau de la Música, encabezado por Fèlix Millet y Jordi Montull, canalizó aportaciones de la constructora Ferrovial para satisfacer «la contraprestación» de obras públicas adjudicadas por los últimos gobiernos de CiU, como la Ciutat de la Justícia y la L-9 del metro. Ese dinero, que correspondería a una comisión del 4%, fue asignado a responsables de las finanzas de Convergència Democràtica (CDC), se ingresó en cuentas de la Fundació Ramon Trias Fargas (hoy CatDem), vinculada a ese partido, y sirvió para pagar a proveedores de dicha fuerza política, como ha adelantado en estos últimos meses EL PERIÓDICO. La cifra presuntamente desviada por esos conceptos desde el 2001 hasta el 2008 asciende a 5,9 millones de euros.

Así de contundente es el informe remitido por Hacienda al juez Juli Solaz, que investiga el saqueo de la entidad. El próximo septiembre, el magistrado fijará el día de la ratificación por parte de los peritos de los tres dictámenes remitidos por la Agencia Tributaria: uno sobre traspaso de fondos irregulares, otro sobre desembolsos a empresas de Millet y Montull, y el último sobre el patrocinio de Ferrovial al Palau y el desvío de importantes sumas económicas por concesión de obras públicas a la constructora. Después de la comparecencia de los expertos, el juez decidirá cómo encauza las pesquisas, si llama a declarar a de nuevo a Millet y si imputa a más personas.

Los funcionarios de Hacienda Elena Lasheras y Manuel Cisneros destacan en sus conclusiones que las relaciones del Palau con Ferrovial, que participó en la ampliación del auditorio, «no eran típicas de patrocinado y patrocinador». Las aportaciones económicas de la constructora estaban muy por encima de las donaciones de otros mecenas y su ingreso en la entidad eran seguidos de desembolsos «casi inmediatos» destinados a realizar pagos a la Trias Fargas o a las empresas New Letter, Letter Graphic, Hispart y Altraforma que, según los nuevos gestores de la institución cultural, no realizaron trabajos para la entidad pero sí para CiU. Cabe recordar que uno de los accionistas de Altraforma es el senador nacionalista Jordi Vilajoana Rovira.

«OTRA FINALIDAD» / Los peritos sostienen que de los documentos hallados en el registro policial practicado en el Orfeó Català-Palau de la Música el 23 de julio del 2009 «se ha llegado paulatinamente a la conclusión de que el grueso de las aportaciones de Ferrovial no constituye la contribución al patrocinio publicitario, sino que tiene otra finalidad, cual es satisfacer la contraprestación correspondiente por la adjudicación de obras públicas, siendo utilizado el Palau de la Música para canalizar los correspondientes pagos». Asimismo, los expertos han cruzado datos con cuentas corrientes y los dietarios de Gemma Montull, exdirectora financiera de la entidad.

Los peritos destacan distintos documentos como, por ejemplo, uno en el que figura Ferrovial, la anotación «obra adjudicada», un porcentaje, «cobrado» y «liquidación de la Generalitat». Y otro en la que Millet pide a Carles Torrent (exadministrador de la Trias Fargas y exresponsable de finanzas de CDC, fallecido en el 2005) la adjudicación de alguna obra pública a la constructora.

Existen escritos que precisan el reparto de comisiones o en los que aparece el nombre de Daniel que, según el análisis, es Daniel Osàcar, que sucedió a Torrent en sus responsabilidades en la fundación de CDC y en el partido. Entre el material investigado hay faxes de Millet dirigidos a Pedro Buenaventura, hasta el 2006 ejecutivo de la constructora, para que hiciera los «pagos acordados», así como anotaciones sobre una comisión por un pabellón en Sant Cugat del Vallès adjudicado por el ayuntamiento de esa localidad.

La posición de Millet en ese «triángulo», según los peritos, no ha sido la propia de un mediador «pasivo»«que se limita a cobrar cantidades de quien debe satisfacerlas (Ferrovial) y entregarlas a las «personas ligadas a la Administración pública», sino que ha desempeñado «un papel extraordinariamente activo». Por un lado, reclamaba la adjudicación de la obra y, por otro, apremiaba «vehemente» a Ferrovial para que no se retrasase en la realización de los pagos.

CAMBIO DE SISTEMA / Al principio, incide el informe, se deduce la existencia de una relación «casi inmediata» entre los pagos de Ferrovial y el importe de la obra adjudicada, pero a partir del 2003 se cambia el sistema por la magnitud de las operaciones y se acuerda el pago en cuatro o más años. Además, se modifica la entrega de dinero por parte del Palau: primero se hace en efectivo a personas ligadas a la Administración y, a partir del 2005, no solo se hacen pagos en metálico, sino que se saldan facturas por servicios nunca prestados en la entidad. La mediación permitía a Millet obtener una retribución.

Ayer, CDC se limitó a decir que el dictamen prueba que no se financió con fondos procedentes del Palau.