Foto 'horribilis'

La actualidad produce en ocasiones secuencias de noticias que se convierten en una foto, a veces terrible, a veces gloriosa, de la realidad. Esa realidad que impide al presidente del Gobierno cumplir su programa electoral. La realidad que sus ministros desfiguran hasta hacerla irreconocible, con interpretaciones delirantes de algo tan objetivable como los datos del paro. Esfuerzo vano, porque la semana que acaba es de las que dejan una foto que ningún Gobierno querría en su álbum.

Comenzó con un fracaso. La amnistía fiscal, discutible y polémica en su propia concepción, terminaba recaudando la mitad de lo que el propio Ministerio de Hacienda se había propuesto como objetivo. Ni siquiera con el perdón los defraudadores se animaron a regularizar su situación. Sin embargo, Cristóbal Montoro habló de éxito y de que había merecido la pena.

Siguió con la detención del expresidente de la CEOE Gerardo Díaz Ferrán, acusado precisamente de tener fuera del país grandes cantidades de dinero y propiedades para evitar pagar a sus numerosos acreedores. Los detalles de la investigación que han ido trascendiendo sobre los apartamentos de lujo en Nueva York, los trofeos de caza o los coches exclusivos escapando al control del fisco son un insulto para todos aquellos que, como él pronosticó, debían salir de la crisis «trabajando más y cobrando menos».

Porque, efectivamente, no sabemos si servirá para salir de la crisis económica , pero trabajar, la inmensa mayoría trabaja más, y cobrar, la inmensa mayoría cobra menos.

El paro se dispara

El paro registrado de noviembre se dispara en 74.000 personas. El número total se acerca a los cinco millones. Bajan las cotizaciones a la Seguridad Social. Pero el Gobierno considera que es un hecho aislado porque son parados y excotizantes generados por sus propios recortes de la ley de dependencia. Eso sí, los pensionistas, que mantienen cada vez a más miembros parados de su familia, sabrán, según la ministra Fátima Báñez, «valorar el esfuerzo que se les pide» al no revalorizarse las pensiones.

Y más en apenas cinco días. El ministro revelación, José Ignacio Wert, convierte la reforma educativa en un instrumento de reafirmación ideológica de la España eterna y, además, se confronta directamente con Catalunya en algo tan delicado como la propia lengua. Pero, eso sí, niega la mayor. Ni existe agresión al catalán, ni se favorece a la escuela concertada ni a la Iglesia católica. Es solo que él, como los toros, se crece en el castigo. Debió elegir esta metáfora para completar el cuadro cañí.

Y el presidente del Gobierno decidió sumarse a la foto 'horribilis' en la fiesta del 34º aniversario de la Constitución. Casi a la misma hora en que el Banco Central Europeo anunciaba que la recesión en la zona euro se prolongará durante todo el 2013, Mariano Rajoy comunicaba a los españoles que el año que viene será mejor que este.