Si pierde el PP, Wyoming a TVE

Segundo Roast en el canal Comedy Central. O sea, el Gran Wyoming servido a la parrilla. A pesar de ser comedia, teatrillo, aguijoneo entre amiguetes, resultó un espectáculo mucho más punzante que el primer Roast, hace unos meses, con Santiago Segura. El duelo con Buenafuente resultó magnífico. Decía: «Este energúmeno es conocido por su activismo de izquierdas, por eso le va tan bien cuando gobierna la derecha», y remató: «Oye Wyoming, cuando se vaya el PP ¿vas a disimular y esperar unos meses o vas a fichar enseguida por TVE?». ¡Ahh! Fueron unas perdigonadas lanzadas con mucha puntería. A las que el propio Wyoming respondió: «Mira Andreu, tu programa no lo veo porque tus chistes ya se han dicho antes, a las diez de la noche, en mi programa. Pero hoy vas a disfrutar: por fin vas a presentar un programa de éxito». Hombre, como ejercicio de dentelladas mutuas no ha estado nada mal. Eran mordiscos con fundamento. Como Yolanda Ramos, cuando le dijo: «Eres muy rojo y tienes muchos pisos. Tú lo que quieres es tener un barrio rojo, todo tuyo, en donde te hinches a follar y luego  te hinches a cobrar alquileres». Incluso hubo humor sobre aquel canalla comentario que lanzó tiempo atrás en la tele el exportavoz de Aznar, Miguel Ángel Rodríguez, llamando cocainómano a Wyoming, y que Falete metabolizó con sarcasmo diciendo: «Los de derechas les dicen a sus hijos: 'O te lo comes todo o vendrá Wyoming y te echará cocaína'». O sea, aún dentro del fair play, el repertorio de andanadas ha sido saludable y profundo. Un buen Roast tiene que ser así. Nada hay más triste que pretender rustir carne a la parrilla y acabar solo escalfándola al baño maría.

OREJAS EN EL AYUNTAMIENTO .- Se ha sentado de nuevo Ada Colau en el sofá de Pepa Bueno (Viajando con Chester, Cuatro). Ha dicho, con rotundidad, que Convergència es un partido «falsamente soberanista».    O sea, un mensaje a la honesta ciudadanía independentista: cuidado con estos compañeros de viaje, que ni son compañeros ni os llevarán a ningún paraíso. También ha advertido su sorpresa ante las filtraciones que están sucediendo en el ayuntamiento: «Parece que las paredes de esta casa tengan ojos y orejas», dijo con estupor. ¡Ahh! Nuestra admirada alcaldesa debería contratar una agencia experta en detección de micros camuflados en paredes y centros florales. Hay una acreditadísima.