La 'buena nueva' de Moody's

La agencia, pese a la propaganda soberanista, no contempla un Estado catalán; solo un acuerdo para "apaciguar el apetito por la independencia"

El 'conseller' Junqueras saluda al ministro Montoro.

El 'conseller' Junqueras saluda al ministro Montoro.

ENRIC HERNÀNDEZ

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Mientras el independentismo pespuntea su recosida hoja de ruta, que en un penúltimo bucle regresa al referéndum --pactado o no-- del 2014, el mundo mira a Catalunya... y con buenos ojos. En un informe para los inversores, la agencia de calificación Moody's celebra que ni la "tensión independentista" ni las "diferencias" entre el Govern y la CUP hayan truncado la senda de la reducción del déficit, y tampoco el crecimiento económico. Eufórico, el soberanismo ha aireado el documento como prueba fehaciente de la viabilidad de un Estado catalán, escenario que Moody's ni siquiera contempla, pero ha silenciado los diagnósticos que le resultan menos gratos.

La agencia analiza cómo puede impactar en la fiabilidad del bono soberano del Reino de España el conflicto con Catalunya, el 19% del PIB estatal. La suya es, pues, una prospectiva política sobre el devenir del proceso secesionista, sobre las probabilidades de que este se complete con éxito o se salde con un fracaso.

«UN NUEVO ARREGLO»

Subraya la agencia de 'rating' que hasta julio aumentaron los ingresos que la Generalitat recibe del Estado, y que sus gastos menguaron gracias al abaratamiento de los intereses de la deuda, obra del Ministerio de Hacienda a través del FLA, y a la reducción de gastos fruto de la prórroga presupuestaria. El anticapitalista veto de la CUP a las cuentas del 2016, clave para prolongar las políticas de austeridad. Aun así, el informe pronostica que a finales de este año la deuda catalana, básicamente en manos el Estado, ascenderá ya a 78.000 millones de euros, dos veces y media el presupuesto de la Generalitat.

Habrá "tensiones políticas" por el referéndum unilateral anunciado por Carles Puigdemont referéndum unilateraCarles Puigdemont, pero Moody's excluye que la sangre llegue al río: ni el Govern sobreviviría sin el auxilio financiero del Estado, ni este puede asfixiar a Catalunya, su gran motor económico. La disputa, concluye, acabará en tablas: "Un nuevo arreglo institucional para apaciguar el apetito de la región por la independencia, dándole mayor flexibilidad fiscal". Esta el verdadera 'buena nueva' de Moody's. Lo demás, pura propaganda.