Las cuatro elecciones del 2015

Un alto directivo de una importante cadena de radio me confiesa que ha preparado el presupuesto del año 2015 calculando que deberán cubrir cuatro campañas electorales. ¿Cuatro? Municipales, catalanas, generales y... las del Barça. Desconozco si tiene una bola de cristal pero algunos hechos de los últimos días le dan la razón. Vayamos por partes.

Pase lo que pase, el 24 de mayo se abrirán las urnas para elegir alcaldes y parlamentos en 13 comunidades autónomas. Desde la Moncloa se han planteado estos comicios como un dilema entre Rajoy y el caos. El viejo lobo de la vieja política está jugando a la ruleta rusa con los candidatos del PP. Se trata de definir una lista de víctimas para esas elecciones. Por eso ha recibido con tan buen humor que Esperanza Aguirre esté dispuesta a inmolarse en Madrid. No es una táctica muy diferente a la que sigue Susana Díaz con Pedro Sánchez. Ambos coinciden en pretender que sean los alcaldes y las autonomías quienes reciban la bofetada de los votantes con el guante de Podemos.

Todo indica que el segundo turno electoral lo tomará el Barça. La velocidad con la que el presidente Bartomeu está fundiendo sus fusibles apuntan a un adelanto de los comicios al mes de junio. Fin de temporada, de ciclo y de época. Una doble finta para ahuyentar los fantasmas del pasado (Rosell) y del futuro (Laporta).

Lista o calendario

El calendario de otoño parece aún más incierto. Mas y Junqueras podrían haber iniciado el deshielo. Las señales de humo apuntan a que el president estaría dispuesto a ir a las urnas en una lista distinta a la de ERC siempre que sus acompañantes no fueran acusados de traidores y corruptos. Si así fuera, al republicano le tocaría ceder en el calendario. En Córcega gusta mucho la fecha del 11 de septiembre. Incluso los alcaldes de CiU consideran que les permitiría salir airosos en mayo.

El último en convocar sería en esta hipótesis el propio Rajoy, apurando la legislatura para recoger los frutos de doce meses de «recuperación» (la suya) y de guerrillas entre PSOE y Podemos.