Endosar

Viene de antiguo y las palabras enseñan más que engañan. Endosar, palabra de origen francés, es ceder a otro un título de crédito, cuyo destinatario se escribe en el dorso del documento. Endorsar sería el término perdido para los lingüistas, que hace alusión a cargar sobre las espaldas de otro los préstamos que no se han devuelto. Fue esa la gran operación de limpieza de los balances de los bancos y cajas (todas se endorsaron a bancos), por sus malas inversiones billonarias (miles de millones), en connivencia del Estado, el ministerio de Economía y el Banco de España. Semejante operación de ocultación y saneamiento derivó en dos siglas: Frob y Sareb, que han quedado inscritas en el dorso de los contribuyentes.

El Frob (socialistas intentando controlar la crisis bancaria) pierde más de lo que anunció en su creación y de lo que predice cada año cuando presenta cuentas. La Sareb (populares intentando contentar a los bancos que se habían tragado las cajas que dirigían sus correligionarios del tocho) también ha arrastrado las pérdidas públicas a la zona más profunda de la tinta roja de sus cuentas. Quienes predican que lo peor de la crisis ha pasado tienden a olvidar a qué coste se ha hecho. Endosando a los contribuyentes y por muchos años.