Crucifixión entre carcajadas

Pocas veces la crucifixión de un ser humano ha provocado tanto cachondeo como la que nos escenificaron en Crackòvia (TV-3). El siempre genial Bruno Oro nos hizo una reencarnación del Sandro Rosell dimisionario, y allí, en el monte Calvario de la rueda de prensa que convocó, se despojó de sus ropajes y se autocrucificó delante de las cámaras. ¡Ahh! Cómo se desternillaban los centuriones periodistas desparramados en aquel Gólgota, y cómo sufría el jefe de prensa adlátere de Sandro, suplicándole entre sollozos: «¿Por qué lo haces? ¿Por qué lo haces, si el juez ya ha dicho que te llamará a declarar, tal como habías solicitado?». Y Sandro contestó: «Deixa'm, deixa'm fer-me la víctima en pau!». ¡Ahh! Qué exacto retrato. La razón por la cual esta crucifixión humana ha merecido las carcajadas de muchos de los informadores asistentes al Crackòvia quizá se deba a que la criatura se ha autocrucificado. O sea, que él mismo se ha atado a la cruz, con sus propias manos. En efecto, es una rareza tan sospechosa como notable. El mordiente de los crackovianos ha sido esta vez de una precisión muy notable. Pero se han quedado cortos con el adlátere que hacía de vocero, publicista y jefe de prensa de Sandro. Al margen de la también excelente interpretación que ha hecho de este personaje Jordi Rios, deberían haber convocado y puesto a su lado a algunas figuritas del equipito de informadores futbolísticos de TV-3. ¡Ahh! Habrían conformado un cuadro doloroso, pero muy enternecedor.

SITUACIÓN DE LOS AUDÍMETROS EN CATALUNYA .-   Acaba de publicar mi admirado Arcadi Espada en El Mundo una meditable pincelada que merece ser investigada. Denuncia Espada que el 80% de los audímetros -los aparatos que miden la audiencia de los canales de TV- que hay instalados en Catalunya están estratégicamente colocados en domicilios en los que se habla exclusivamente el catalán. Añade Espada que la lengua mayoritaria en Catalunya sigue siendo el castellano, y en consecuencia advierte que si los audímetros estuvieran colocados aleatoriamente, y no se hubiera preprogramado o manipulado su ubicación, probablemente TV-3 no sería la cadena más vista en Catalunya, como vienen diciendo estos audímetros desde hace años. ¡Ah! Es un tema suculento. La empresa que tiene el monopolio de estos aparatos, Kantar Media -antes llamada Sofres- debería pronunciarse.