El epílogo

Adiós a un periodista

ENRIC HERNÀNDEZ

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A veces en esta vida te topas con compañeros que te marcan para siempre. A mí me sucedió en 1990, en la redacción del diarioAvui. Él contaba 30 años y atesoraba ya una larga experiencia en el oficio; yo, con apenas 21, estaba aún por hacer. De él aprendí, mal que bien, algo fundamental para cualquier periodista: a tener criterio, a distinguir entre el hecho trascendente y el accesorio, entre la categoría y la trivialidad. También a estructurar una crónica, a imprimirle cierto ritmo, a titular con intención. O eso creo. Sin el menor asomo de arrogancia ni paternalismo, me adiestró en el uso de los aparejos de este oficio para que pudiera labrarme una carrera.

Cuando tenía una idea, su mirada cobraba un brillo particular, destellos de una genialidad que unas veces verbalizaba y otras plasmaba por escrito. Irónico más que socarrón, de voz grave y afán polemista, jamás fue cómodo para sus superiores. Acaso por ello optó por explorar caminos profesionales distintos a los de la prensa convencional.

Aún recuerdo el entusiasmo con el que hablaba del periodismo digital cuando muy pocos lo hacían, a mediados de los años 90. Aunque echaba de menos el ambiente de la redacción de un diario, los ojos le brillaban de nuevo cuando hablaba del universo de posibilidades que internet abría para el sector de la comunicación. Ya por entonces, hará unos 15 años, estaba convencido de que el futuro del periodismo estaba en la red. Mejor nos hubiera ido a los medios , en general, si le hubiéramos prestado mayor atención.

Además de ejercer la docencia en la Universitat Oberta de Catalunya y publicar varios estudios sobre la materia, regresó al periodismo activo en la redacción digital de La Vanguardia. Puedo imaginarme sus esfuerzos por transmitir a una nueva generación de periodistas los conocimientos que había adquirido.

Una profesión mejor

Enric Bruguera falleció ayer en Barcelona, con solo 51 años, víctima del cáncer. Ese ingrato oficio quizá no premiará sus esfuerzos por construir un periodismo mejor, pero quienes a su lado lo aprendimos sí los tendremos presentes. Gracias.