Rabat: "Este título va dedicado a mi madre"

"Soy muy feliz. Y lo soy por mi familia, especialmente por mi madre, Cuca, fallecida hace dos años, a quien dedico este título porque estoy convencido, seguro, de que, esté donde esté, ha estado empujándome durante cada carrera para que pueda coronarme campeón del mundo. Así que este título está especialmente dedicado a ella", ha comentado Esteve 'Tito' Rabat después de daberse campeón de Moto2 y secarse las lágrimas, nada más bajar del podio del GP de Malasia, en el que ha compartido méritos con el también catalán Maverick Viñales ("Tito se lo merece y mucho") y el finlandés Mika Kallio, compañero de equipo del nuevo campeón.

"Todo el mundo sabe que me ha costado horrores llegar hasta aquí y no podía equivocarme el último día, así que he decidido correr conservador y decirle a mi cerebro que actuase en 'modelo título' y no se liase", ha añadido. "He salido bien, pero enseguida me he dado cuenta de que el calor y la rueda delantera de mi moto me iban a complicar la existencia, pues se movía muchísimo, no era estable y me daba algo de miedo caerme. Durante la carrera he recordado en diversas ocasiones el accidente, la caída, del domingo pasado de Cal Crutchlow, que se cayó en la última vuelta de Phillip Island cuando iba a quedar tercero", ha explicado.

Cansado por entrenar tanto

Rabat, que se pasó, como suele ser habitual en él en cada gran premio, dando un montón de vueltas al circuito el viernes, sábado y este domingo por la mañana, ha reconocido "estar algo cansado de haber entrenado tanto". "He decidido no apretar, reposar, pilotar tranquilo, ya que nadie me apretaba, y sentenciar el título, a poder ser, con un podio", ha dicho. También ha recordado cuando empezó a correr a los 12 años ("tal vez tarde, tal vez mucho después de que lo hicieron todos mis compañeros de profesión y parrilla"), pero ha insistido en que "desde aquel primer día", desde su primera carrera, su sueño era ser campeón del mundo. "Por fin lo he conseguido", ha rematado.

El hijo del popular relojero barcelonés ha reconocido que "puede que todo el mérito haya sido ser perseverante, constante, sacrificado y muy profesional". "En ese sentido, solo en los dos últimos años, gracias a la ayuda de mis mánagers, mi preparador físico, mi psicóloga, mi dietista, mi familia y todo mi equipo he podido cumplir ese sueño", ha insistido. También ha explicado que "en las primeras carreras de la temporada, lo único importante, se moviese o no la moto, tomase o no muchos riesgos, fuese por el sitio o no, lo vital, lo fundamental, era ganar, conseguir el mayor número de victorias posibles". "Solo ahora, en las últimas tres carreras, he hecho un plan que no me ha fallado y me ha llevado al título: ser el mejor, lograr la 'pole', en cada gran premio y subirme al podio en la carrera", ha rematado.