La Eurocámara, contra el uso del aditivo tóxico DEHP en plásticos reciclados

Pese a esta oposición, es la Comisión Europea la que tiene la última palabra en el asunto

Una sesión del Parlamento Europeo de Estrasburgo.

Una sesión del Parlamento Europeo de Estrasburgo. / periodico

MARGALIDA VIDAL / BRUSELAS

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El Parlamento Europeo ha aprobado este miércoles una resolución contra la autorización del uso del componente tóxico DEHP en plásticos PVC blandos reciclados. La moción se opone a una propuesta de la Comisión Europea para permitir tal uso a tres empresas europeas, dos de ellas de reciclaje y una de moldeo de plásticos. La resolución argumenta que este aditivo plastificante, usado para suavizar materiales, tiene “efectos perjudiciales para la salud humana”.

En la práctica, este uso del DEHP se traduce en el contacto directo del aditivo químico con los ciudadanos a través de objetos de uso cotidiano, como zapatos, muebles, suelos, etc. Pese a la posición del Parlamento, es la Comisión quien tiene la última palabra en este asunto, ya que la decisión de la Eurocámara no es vinculante.  

El ftalato de bis(2-etilhexilo), conocido como DEHP, figura en la lista REACH de la Agencia Europea de Sustancias y Mezclas Químicas, que incluye las sustancias que requieren autorización para su uso. En la clasificación, el DEHP aparece en la categoría 1B, que corresponde a las sustancias tóxicas para la reproducción. Además, el componente químico es candidato a entrar en otro registro de sustancias altamente preocupantes debido a sus propiedades de alteración endocrina en mamíferos. 

“Las peticiones de autorización tienen varios puntos débiles; por ejemplo, las empresas solicitantes no han demostrado que los riesgos para la salud de los trabajadores están controlados de forma adecuada”, explica Pavel Poc, eurodiputado checo del grupo socialdemócrata y uno de los impulsores de la moción.

SIN ALTERNATIVAS

Por su parte, la Comisión Europea argumenta que “no existen alternativas y el hecho de no conceder las licencias tendría implicaciones significativas para los solicitantes y sus cadenas de suministro”, tal y como apunta Lucia Caudet, portavoz de Mercado Interior, Industria, Emprendimiento y Pymes.   

Después de obtener el apoyo de la Comisión de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria del Parlamento, la Eurocámara aprobó ayer en sesión plenaria en Estrasburgo la objeción, que recibió 603 votos a favor, 86 en contra y 5 abstenciones.