Valérie Trierweiler busca una "salida digna"

Valérie Trierweiler ha decidido mantener su agenda de primera dama de Francia en lo que parece un pulso con François Hollande antes de la anunciada "clarificación" sobre la pareja presidencial. Pese a la cura de reposo prescrita por los médicos tras sufrir un 'shock' emocional debido a la publicación de la infidelidad del presidente con la actriz Julie Gayet, Trierweiler viajará el domingo a la India para participar en una acción humanitaria.

Trierweiler ha tomado esta decisión después de desautorizar a su abogada, Frederique Griffard, por haber manifestado que la primera dama busca una "salida digna" del Elíseo.

"Ha hablado sin mi consentimiento, ya no me representa", ha dicho Trierweiler en alusión a la letrada desde La Lanterne, residencia oficial de la presidencia, situada en Versalles, donde la aún primera dama se ha refugiado para descansar después de una semana de hospitalización. Griffard declaró a 'Le Figaro' que Trierweiler y Hollande "reflexionan" en torno de la "clarificación" prometida por el jefe del Estado antes de su viaje oficial a Estados Unidos, el 11 de febrero. Sostuvo también que Trierweiler --casi tan impopular en los sondeos como el presidente-- no desea dificultar el mandato de Hollande.

La iniciativa de Trierweiler de viajar a la India ha cogido por sorpresa a Hollande durante su desplazamiento a Roma, donde se ha entrevistado por primera vez con el papa Francisco para intentar reconciliarse con la comunidad católica, muy molesta con el presidente francés tras la aprobación de las bodas gais y de la nueva ley del aborto.

Asociación humanitaria

La primera dama ha hecho saber que irá a Bombay invitada por la asociación humanitaria Acción contra el Hambre, desplazamiento previsto desde antes del escándalo sobre la agitada vida amorosa del presidente, y que no va a cargo del presupuesto público. Sin embargo, si Trierweiler fue invitada a la India --donde participará en una gala para recoger fondos y visitará un suburbio-- es porque es la pareja oficial del jefe del Estado.

Según algunas fuentes, Hollande esperaba que este desplazamiento fuera anulado. El presidente no desea prolongar más la indefinición sobre su vida sentimental, que contamina su acción política, y quiere clarificar las cosas antes de que Trierweiler tome el avión, el domingo. "Es una situación grotesca", ha lamentado la oposición, que no deja pasar un día sin interrogar sobre el estatus de la primera dama.