Grynspan: La Cumbre Iberoamérica se alineará a los objetivos de desarrollo

La XXVI Cumbre Iberoamericana, que se celebrará en Guatemala en noviembre de 2018, buscará vincularse a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030, dijo en entrevista con Efe la secretaria general iberoamericana, Rebeca Grynspan.

"Aquí la idea también es vincularnos en algún momento a la agenda internacional, que es la agenda de desarrollo sostenible, que tiene objetivos específicos que han sido pactados y consensuados a nivel internacional", explicó la titular de la Secretaría General Iberoamericana (Segib) en Guatemala.

La costarricense, en el cargo desde el 1 de abril de 2014, señala que el fin es buscar la prosperidad, la inclusión y la sostenibilidad, los pilares del desarrollo sostenible y pensar cómo la región "puede contribuir a la concepción de esos objetivos" sin dejar atrás el crecimiento y el combate a la pobreza y la desigualdad.

Pero para ello, considera, hay que enfrentar "retos muy grandes" pues "el mundo está en un momento de mayor incertidumbre, de mayor volatilidad y de bajo crecimiento y por supuesto la región no se puede retraer de lo que está pasando" a nivel global.

Grynspan, hija de migrantes polacos de ascendencia judía, expresa su creencia en el diálogo y la paz, en la "política de buena vecindad" y en los mecanismos internacionales para las relaciones mutuas.

Así responde al ser preguntada por el caso de Venezuela, donde espera una "salida dialogada" y, en el caso de Estados Unidos, pide tiempo para ver cómo se van a ir concretando las propuestas políticas iniciales del Gobierno de Donald Trump: "Yo creo que comienzan a haber matices y conversaciones, pero esperaremos los acontecimientos y actuaremos en consecuencia".

Aún así, Grynspan, una mujer de verbo tenaz y vigoroso, no duda en destacar los avances logrados: "Estamos saliendo de dos años consecutivos de tasas de crecimiento negativas para la región Iberoamericana" y para 2017, según los pronósticos, habrá tasas positivas promedio.

"La recuperación se está dando, pero la recuperación es lenta", reseña, y añade que estos años hacia la cumbre de jefes de Estado del 15 y el 16 de noviembre de 2018 servirán para hablar de esos retos, que son muchos, y para buscar posibles soluciones.

A su juicio es necesario mejorar la productividad, diversificar la matriz productiva, mejorar la calidad de la educación y apostar por el talento para generar oportunidades de empleo y emprendimiento para el grupo de jóvenes más grande, entre 15 y 29 años, que alguna vez haya tenido la región.

"Yo creo que ese es el gran reto que tenemos en la región. Cómo vamos a poder responder a las expectativas de una ciudadanía, no solo de una juventud, sino de una ciudadanía que espera servicios de mejor calidad, mejores instituciones, que es menos tolerante a la corrupción a la corrupción y a la desigualdad", consideró.

Bajo el lema "Una Iberoamérica próspera, inclusiva y sostenible" tendrá lugar en la ciudad colonial La Antigua de Guatemala en noviembre de 2018 la reunión de los 22 jefes de los Estados miembros -19 de América Latina de lenguas castellana y portuguesa, más Andorra, España y Portugal-.

Hasta esa fecha, Guatemala, y otros países como Ecuador, Estados Unidos, España o Panamá, albergarán conferencias de ministros sobre Justicia, Cultura, Educación, Trabajo, Turismo, Economía, Educación, Juventud o Ciencia, además de foros cívicos y encuentros empresariales.

Grynspan, contenta de que el país centroamericano sea sede de esta cita, mostró su deseo de que los mandatos recibidos en Colombia (Cartagena) en la pasada cumbre de octubre de 2016 se cumplan y que en 2018 se puedan presentar resultados para seguir construyendo "un espacio constructivo y de confianza entre los países de que estamos, efectivamente, cumpliendo con las expectativas".

Guatemala era, junto con Nicaragua, Honduras y Andorra, el país que aún no había albergado ninguna edición de la Cumbre Iberoamericana desde que se inició en 1991 con el fin de ser un espacio de reflexión sobre los desafíos internacionales, así como mediar para el impulso de la cooperación, coordinación y solidaridad regional.