Wilkinson: "La crisis evidencia la importancia de la desigualdad"

Richard Wilkinson

Richard Wilkinson / periodico

AGUSTÍ SALA / BARCELONA

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Richard Wilkinson lleva años analizando el impacto de la desigualdad, no solo en la economía sino en las sociedades. Epidemiólogo y con formación previa en Historia Económica por la London School of Economics, considera que la crisis que estalló en el 2009 ha servido para evidenciar la importancia de los desequilibrios entre ricos y pobres.

Wilkinson, que ha pronunciado esta semana en Barcelona la conferencia inaugural 2016-2017 de la Fundació Josep Irla, de ERC, es coautor de 'Desigualdad: Un análisis de la (in)felicidad colectiva' (Turner, 2009) o en la versión inglesa 'The Spirit level: why more equal societies almost always do better' (Allen Lane, 2009), junto con Kate Pickett. En conversación con EL PERIÓDICO asegura que cuando escribieron el libro, basado en más de 30 años de investigaciones, "nadie estaba interesado ni hablaba de la desigualdad". Ha sido con la crisis que esta variable, que él ve como una enfermedad social, se ha situado en todos los análisis, desde los del Fondo Monetario Internacional (FMI) hasta la OCDE.

Y ser un país rico no es una garantía. "Todos los problemas de salud y sociales son entre el doble y 10 veces más comunes en EEUU que en los países escandinavos. En EEUU hay tasas más elevadas de violencia y la esperanza de vida es de las más bajas del mundo desarrollado", explica. Este profesor de la Universidad de Nottingham (Reino Unido) afirma que las sociedades más desiguales son también las que más violencia padecen o tienen menos esperanza de vida. "Muchos de los problemas en las zonas pobres no son solo de salud sino de escasa educación, más violencia... y son más comunes en sociedades más desiguales". No solo para los pobres sino para el conjunto de la sociedad.

Según Wilkinson, la crisis puede haber empeorado la situación al imponerse la austeridad y los recortes, que afectan a los más vulnerables, como en el caso de España. "Los problemas sociales crecen cuando las diferencias empeoran. En cambio, en países más equilibrados, como los escandinavos o Japón, son menos comunes".

Además, en estos últimos también hay más concienciación por los intereses comunes ¿Un ejemplo? El reciclaje, que en los países más equilibrados socialmente está más extendido porque dan importancia al interés común.

REDUCIR EL CONSUMISMO

A su juicio hay que reducir el consumismo, que frena la sostenibilidad e incita a gastar y endeudarse para tener el producto que otorga estatus. Diversos estudios reflejan que las personas que viven en las zonas más desiguales de EEUU destinan más porción de sus ingresos a comprar un buen coche que quienes viven en zonas menos desequilibradas.

A su juicio hay que "extender la democracia en la economía" para crecer de forma más equilibrada, con más autoempleo, cooperativismo y otras iniciativas de este tipo.

En su opinión, el 'brexit' ha sido "un error terrible". "El peligro es que las empresas quieran irse de Reino Unido para tener acceso al mercado europeo y el Gobierno responda con rebajas fiscales como incentivo. Corremos el riesgo de convertirnos en un paraíso fiscal para las empresas y eso empeoraría las cosas y, en particular, si los conservadores siguen al frente", sentencia.