La UE pacta nuevas ayudas a Grecia de 109.000 millones

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Los jefes de Estado y de Gobierno de la zona euro aprobaron anoche un segundo plan de rescate de Grecia con una inyección de 109.000 millones en nuevos préstamos, rebajaron el tipo de interés que cobran al país por la ayuda europea y alargaron los plazos de devolución de los préstamos concedidos. La banca y los inversores privados contribuirán al rescate heleno con otros 50.000 millones adicionales, tal como había exigido desde el principio la cancillera alemana, Angela Merkel. El acuerdo debería devolver la tranquilidad a los mercados y reducir la penalización que están sufriendo la deuda pública española e italiana.

El nuevo plan de rescate permitirá a Grecia mantenerse a flote financieramente durante los próximos tres años, gracias a los citados nuevos préstamos de 109.000 millones que aportarán conjuntamente la zona euro y el Fondo Monetario Internacional (FMI). Dos tercios de la cifra serán aportados por la zona euro y el tercio restante por el FMI. El plan de rescate se complementará con el desbloqueo de los fondos regionales europeos destinados a Grecia para financiar inversiones que mejoren su competitividad y su capacidad de crecimiento.

REBAJA DEL TIPO DE INTERÉS / El coste de los préstamos europeos a Grecia se reducirá alrededor de un punto porcentual y pasará de los actuales 4,2%-4,5% a un 3,5%, para reducir la carga financiera que soporta el país. Asimismo, el plazo de devolución de los créditos se ampliará de los actuales 7,5 años a un mínimo de 15 años, ampliable a 30 años con un periodo de gracia adicional de 10 años. Estas mismas ventajas se aplicarán a los préstamos concedidos a Irlanda y Portugal, precisaron los líderes europeos.

Después de semanas de bloqueo y tras ocho horas de negociación, los líderes de la zona euro llegaron a acuerdo sobre la controvertida contribución de la banca y los inversores privados al plan de rescate, que fue satisfactorio para el Banco Central Europeo (BCE) porque considera que «no conducirá» a una declaración de «impago parcial» o «incumplimiento griego por parte de las agencias de calificación (rating).

CASO ÚNICO EXCEPCIONAL / Por si acaso, los líderes subrayaron en las conclusiones de la cumbre que Grecia es un caso excepcional que «requiere una solución única y excepcional» y que, por tanto, será la única vez que se pedirá una contribución de la banca y los inversores privados al rescate de una país de la zona euro. Los líderes reafirmaron además de forma «solemne» su «inflexible determinación» a respetar totalmente su deuda pública.

La banca y los inversores privados que suman el 90% de la deuda emitida se han comprometido de forma «voluntaria» a contribuir al rescate de Grecia, mediante diferentes fórmulas que no se detallan en las conclusiones para privar a las agencias deratingde argumentos para declarar un impago.

La contribución de la banca mediante el canje de deuda griega por nuevos bonos a largo plazo (entre 11 y 30 años) y la compra de nuevos títulos al vencimiento de los existentes en su cartera supondrá un esfuerzo financiero de unos 37.000 millones, según las cifras detalladas en las conclusiones de la cumbre.

RECOMPRA DE DEUDA / A esa cifra se añadirán otros 12.600 millones que será la pérdida estimada para los inversores privados por las operaciones de recompra de deuda pública por parte de Grecia que se realizarán durante el periodo 2011-2014. Como la deuda pública griega ya emitida cotiza alrededor del 50% de su valor nominal, la recompra implicará el pago de una cifra sustancialmente inferior a ese valor nominal. Estas operaciones de recompra de deuda en circulación a bajo precio deberían permitir reducir de forma significativa el montante total de deuda pública griega a un nivel sostenible. La deuda pública griega supera los 328.000 millones y representa más del 142% del producto interior bruto (PIB).

Los líderes de la zona euro acordaron además facilitar recursos adecuados para recapitalizar los bancos griegos si fuera necesario y apuntalar la calidad de sus garantías para poder seguir recurriendo a la financiación del BCE para su normal funcionamiento. La cumbre finalmente decidió que debe recortarse la dependencia en las valoraciones de las agencias deratingen la UE.