La otra financiación

En el mundo empresarial no solo los emprendedores que inician un negocio tienen dificultades para obtener financiación y sobrevivir, también las compañías pequeñas y medianas (pymes) ya consolidadas, pero que quieren afianzar su crecimiento o todas aquellas que no pertenecen al selecto club de las que pueden emitir deuda.

En este contexto, 10 empresas participaron ayer, tras ser objeto de una selección previa, en el Cuarto Foro Capital Pymes en busca 21 millones de euros. Ayer tuvieron la oportunidad de contar sus proyectos de internacionalización y crecimiento ante un grupo de 40 inversores cualificados convocados por este foro en el que participan la empresa municipal Barcelona Activa, la Cambra de Comerç, la patronal Pimec y el Institut Català de Finances (ICF), entre otros organismos.

Se trata de facilitar recursos a compañías con una facturación media de unos 4,5 millones de euros anuales, al menos cinco años de antigüedad y que buscan entre 100.000 y seis millones de euros de capital porque encuentran difícil obtenerlos a través de la tradicional financiación bancaria.

«Básicamente son empresas que quieren aumentar su presencia en el exterior, replicar modelos de éxito en otros nichos de mercado o zonas o desarrollar innovaciones de producto o de procesos», explica Miquel Costa, que es el presidente de este foro. A partir de ahora compañías e inversores inician negociaciones que pueden durar meses, pero también solo unos días cuando la sintonía entre ambas partes es rápida.

Las seleccionadas ofrecen una gran rentabilidad potencial y pertenecen a sectores como la industria, la informática, las telecomunicaciones o la metalurgia, según explican los organizadores. No se trata solo de una cuestión monetaria.«No vienen solo a buscar dinero sino que obtienen ayuda para la profesionalización»que ofrecen losfamily offices(sociedades que vehiculan las inversiones de miembros de empresas familiares) o fondos de capital riesgo especializados, afirma Costa.

Para el foro no es cuestión además de«ser un sustituto de la banca porque existe un potente instrumento de fortalecimiento que es la ampliación de capital». Y es que en España las empresas tienen un problema de dimensión.«Mientras que en España la facturación media por compañía es de unos tres millones, en Alemania es de unos 30 millones», explica.

Lo habitual en las empresas españolas era recurrir al crecimiento basado en el endeudamiento bancario, pero la crisis ha obligado a cambiar comportamientos y apostar por vías más a la americana, donde prima los mercados de capitales y las fuentes de financiación alternativas a la banca.

Las pymes seleccionadas en la actual edición suman una facturación total de 55 millones de euros. Los precedentes de las seleccionadas son buenos, ya que el 65% de las 37 que participaron en los tres foros anteriores obtuvieron los recursos que buscaban para reforzar su crecimiento, explica Costa.

Entre las historias de éxito participantes en ediciones anteriores del foro se encuentra por ejemplo el grupo de pymes tecnológicas Inkemia, que en diciembre pasado comenzó a cotizar en el mercado alternativo bursátil (MAB) y en la tercera edición de este encuentro obtuvo unos 2,5 millones de euros para profundizar en su internacionalización. Otro de los casos es el del productor de vehículos eléctricos Going Green, que construyó hace unos meses una fábrica de motocicletas eléctricas en el área de Barcelona.