Los autobuses eléctricos BYD se probarán en Sant Cugat del Vallés

La localidad barcelonesa de Sant Cugat del Vallés se ha convertido ya en la tercera ciudad española, después de Madrid y Barcelona, que pondrá en circulación, en período de pruebas, dos autobuses eléctricos de la fabricante china BYD, anunció este viernes la compañía con un comunicado.

Se trata de autobuses totalmente eléctricos, sin emisiones contaminantes, de 12 metros de largo, con una tecnología de esta fabricante de baterías y de vehículos eléctricos e híbridos de Shenzhen (provincia de Cantón, sureste), que se ha ensayado en más de 150 países, medio centenar de ellos en Europa, según la compañía.

El operador de los autobuses en Sant Cugat será la empresa local Moventis, que según anunció este viernes BYD, firmó anteayer con la fabricante china el contrato para el alquiler de estos dos vehículos, de manera que puedan ser puestos a prueba en las calles de la ciudad. Según BYD, el consistorio de Sant Cugat y la empresa Moventis expresaron que, por su compromiso con un "desarrollo sostenible", inician este período de pruebas de "autobuses sin emisiones (contaminantes) fabricados con la tecnología más avanzada de BYD" con la confianza de obtener "una experiencia exitosa".

BYD, que fabrica también automóviles eléctricos, como su modelo emblemático E6, e híbridos, como su todoterreno Tang, está tratando de extender las ventas mundiales de su autobús eléctrico K9, que la firma china ha suministrado también a TMB, la gestora del transporte público de Barcelona, donde circula en pruebas desde hace un año. Se trata de un modelo que puede circular durante 250 kilómetros con una sola recarga de su batería a máxima capacidad, y del que ya vendió también a principios de este año sus primeros cinco autobuses en el mercado japonés, en la primera exportación de vehículos fabricados enteramente en China hacia el exigente mercado nipón.

Según sus cálculos preliminares no auditados, presentados en febrero, los beneficios netos de BYD (cuyas siglas vienen de su nombre en inglés, "Build Your Dreams" -"Construye Tus Sueños"-) cayeron un 21 por ciento en 2014, hasta los 437,9 millones de yuanes (64,4 millones de euros, 69,9 millones de dólares). La firma atribuyó esta caída a su fuerte competencia con los coches convencionales y a la ralentización del sector en China, a la par que el propio crecimiento de la economía nacional.