Bruselas augura un agujero en las cuentas públicas este año del 4,7%

La Comisión Europea sigue pensando que el gobierno de Mariano Rajoy peca de optimismo en sus previsiones económicas y augura que el desvío en las cuentas públicas será mayor del pronosticado hace menos de un mes, cuando el colegio de comisarios aprobó el dictamen sobre el polémico presupuesto elaborado por el gobierno del PP para el próximo año. Según las nuevas proyecciones de otoño, el agujero del déficit público será este año del 4,7%, medio punto por encima del objetivo acordado con la UE. En 2016, el desvío se situará en el 3,6%, ocho décimas por encima de la meta fijada.

Estos significa que el incumplimiento de la senda del déficit público anunciada el pasado 12 de octubre será todavía mayor. Entonces, Bruselas preveía un agujero en las cuentas públicas del 4,5% este año y del 3,5% el próximo. Apenas tres semanas después se ve obligada a revisar al alza sus propias cifras en dos y una décima respectivamente. Y lo hace por dos motivos. Para empezar por el empeoramiento de una décima del déficit público en 2014 confirmado hace dos semanas por Eurostat y que fue del 5,9% frente del 5,8% inicialmente anunciado.

Y, en segundo lugar, porque la Generalitat de Catalunya y el ayuntamiento de Zaragoza ocultaron gastos en inversiones públicas por valor de 1.518 millones de euros anteriores a 2013 que Eurostat ha obligado a España a computar como déficit este año y que equivale a otra décima. "Los riesgos a esta previsión de déficit derivan del grado de restricción en el gasto, principalmente a nivel de comunidades autónomas", avisa el análisis sobre el temor de que el gasto de gobiernos autonómicos y corporaciones locales pueda inflar todavía más el déficit. "Dados los datos de ejecución es más que posible que las administraciones de los territorios no cumplan. Es difícil que las comunidades autónomas cumplan pero también la Seguridad Social", añaden.

Esto significa que España necesitaría otro año más, hasta finales de 2017, para situar las cuentas públicas dentro de los límites que marca el Pacto de Estabilidad y Crecimiento en la que sería la cuarta prórroga, tras las dos logradas por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y la tercera lograda por Rajoy en 2013 cuando el Ejecutivo comunitario le dio dos años más para situar el déficit por debajo del 3% del PIB.

La nueva radiografía elaborada por los técnicos comunitarios también confirma que aunque España será una de las grandes economías de la zona euro que más crecerá, el despegue será mucho más raquítico que el previsto por las autoridades españolas. Según Moncloa, el producto interior bruto (PIB) crecerá este año un 3,3% y un 3% el próximo. Bruselas enfría este optimismo con una previsión del 3,1% y del 2,7% respectivamente -2,4% para 2017- que estará impulsada por la demanda doméstica, que seguirá siendo el principal motor del crecimiento apoyado por una baja inflación, la reciente reducción del IRPF, la ligera mejoría del mercado laboral y unas exportaciones que seguirán ganando terreno e impulsarán el superávit por cuenta corriente. "Aun así, el aumento en la renta bruta disponible deja margen a los hogares para aumentar su tasa de ahorro", apunta el informe que augura también un repunte de la construcción, incluida la inversión residencial, en el año 2015 y especialmente en 2016. España no recuperará, sin embargo, la riqueza que alcanzó antes de la crisis hasta el final del período de las previsiones, en 2017.

En cuanto al mercado laboral, otra de las asignaturas pendientes de España, la Comisión Europea confirma que durante la primera mitad del año se registró una pequeña expansión que ha conseguido reducir la tasa de paro al 22,3%. La tendencia seguirá mejorando aunque para 2016 auguran que seguirá estando por la barrera del 20% y solo bajará de ese umbral en 2017. "La continuada moderación salarial que resulta en modestos incrementos de los costes laborales unitarios sigue apoyando una robusta creación de empleo aunque en desaceleración", advierten los expertos europeos. La deuda pública también seguirá disparada por encima del 100% hasta 2017.

LA ZONA EURO

Según las nuevas previsiones, la economía de la zona euro crecerá este año un 1,6%, un 1,8% en 2016 y 1,9% en 2017, ligeramente por debajo de los pronósticos previstos para el conjunto de la Unión Europea donde el PIB alcanzará el 1,9%, 2% y 2,1% respectivamente. Los mayores crecimiento se registrarán este año en Irlanda (6%), República checa y Malta (4,3%), Polonia y Rumanía (3,5%) y Eslovaquia (3,2%). Entre los grandes países, mientras, la economía avanzará este 2015 con mayor lentitud: Alemania (1,7%), Francia (1,1%) e Italia (0,9%).

"Las previsiones económicas de hoy muestran que la economía de la zona euro sigue con una recuperación moderada. El crecimiento está apoyado por factores temporales como el bajo precio del petróleo, la debilidad de la tasa de cambio del euro y la política monetaria acomodaticia del BCE", señala el vicepresidente de la Comisión, Valdis Domvrovkis. "De cara a 2016 vemos que que el crecimiento va a aumentar y el paro y los déficit públicos caerán", añade el comisario Pierre Moscovici.

Las previsiones también incluyen por primera vez un análisis sobre el impacto de la crisis de los refugiados. Según las estimaciones que barajan durante los tres años de horizonte de las previsiones económicas (2015-2017) llegarán a Europa entorno a 3 millones de personas, lo que significará un aumento de la población del 0,4%, que generarán un impacto económico débil pero positivo que podría alcanzar el 0,3% del PIB. Entre los riesgos a la baja para la economía europea, el deterioro de las perspectivas de las economías emergentes, especialmente de China.