ASOCIACIÓN DE GALLEGOS DE LA ZONA FRANCA

Gaitas catalanas

Sesión dominical 8 Un grupo de profesores de la escuela Toxos e Xestas ensayan y preparan las clases.

Sesión dominical 8 Un grupo de profesores de la escuela Toxos e Xestas ensayan y preparan las clases.

BEATRIZ PÉREZ
BARCELONA

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En el barrio de la Zona Franca de Barcelona, apartado del ruido de las calles principales y las tiendas, se halla el local de la Escuela de Gaitas y Danzas Toxos e Xestas, fundada en 1977 por el lucense Xosé Lois Foxo. Este gallego, que entonces era un joven de 25 años emigrado a la gran ciudad para iniciar sus estudios universitarios de traducción e interpretación en Bellaterra, no imaginó en qué se acabaría convirtiendo su proyecto inicial.

Hoy, es un lugar de encuentro de gallegos emigrantes o de catalanes descendientes de gallegos; un espacio de fomento y protección de la idiosincrasia de Galicia a más de mil kilómetros de distancia.

Padres e hijos

La escuela, donde actualmente se imparten clases de gaita, percusión, teatro, canto y baile gallegos, comenzó siendo una academia particular de música en un bar del barrio de Gràcia. En la década de los 80 alcanzó los 300 alumnos.«Hoy ya son miembros de la escuela más de 400 familias, y tenemos alumnos de entre 2 y 80 años»,explica su actual presidente, José Ares. Por los pasillos del local un grupo de niños corre y juega con una pelota, mientras que en la antesala varios adultos ven la televisión al tiempo que conversan. Se oye una melodía de gaita que parece provenir de la estancia del fondo del pasillo; alguien está ensayando.

Carmen Blanco, socia desde hace 25 años, tenía 7 cuando entró en la escuela. Sus padres son gallegos; ella, como sus hijos, catalana. La escuela, explica, es su manera de mantener los lazos con una Galicia lejana.«Yo conocí aquí a mi marido; se forman matrimonios dentro de la asociación». Todos tienen familia gallega y muchos de ellos incluso veranean allí.«¡Sergio, prou!», le ordena Blanco a su hijo pequeño, que corretea de un lado a otro entre gritos.

La escuela Toxos e Xestas, que fue la primera creada en Barcelona, participó recientemente en la cabalgata de Reyes y organizó en el 2010 certámenes como el 26º Festival de Música Galega en Barcelona y el 5º Día da Galicia Exterior, o el homenaje a la cantante folclórica Ana Kiro, celebrado en agosto. En febrero viajarán a Francia para participar en un campeonato de gaitas. Y cada año los miembros asociados celebran, además, fiestas típicas gallegas como el Carnaval («el entroido», dice Arsenio Castro, que fue presidente de la escuela durante 20 años) y elmagostoo castañada, fiesta popular ourensana en la que, alrededor de una hoguera, asan kilos de castañas, hacen una parrillada y bailan hasta altas horas de la madrugada bajo el frío otoñal de noviembre

Ninguno habla demorriña, pero todos parecen echar de menos ese extraño lugar al norte de España donde el sol se pone sobre el mar.