Simeone: "No me preparo para gustar a nadie, me preparo para ganar"

El técnico del Atlético no pierde "ni un segundo" en analizar la batalla que se vivirá entre el 'guardiolismo' y el 'cholismo'

Simeone, en la sala de prensa del Allianz Arena de Múnich.

Simeone, en la sala de prensa del Allianz Arena de Múnich. / periodico

MARCOS LÓPEZ / MÚNICH

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El comandante también es humano. El comandante Simeone, según lo popularizó la Gazzetta dello Sport en una portada que ha dado la vuelta al mundo, sabe de sus ideales futbolísticos. Pero eso no le exime de ser alguien terrenal, por mucho que en Italia se le haya convertido en el revolucionario del catenaccio 3.0 ya que lo auténtico (Juve manda en el calcio, pero no en Europa, ¿Milan? Ni rastro de lo que fue ¿Inter? Un desecho ahora mismo) no tiene ya valor alguno. Los padres del viejo fútbol ultradefensivo han adoptado a Simeone y al cholismo, como la nueva religión del otro fútbol que librará en Múnich una batalla con el fútbol de Guardiola (o del Barça) capaz de ganar hasta cuando no juega.

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Hay fanáticos del cholismo que son más cholistas que el Cholo. Pero él, en cambio, cuando entró en la casa de Guardiola, que agota sus últimos días en la poderosa y rica Baviera, no tuvo reparo alguno en confesar sus miedo. Sí, sí esa fue la palabra. «Yo no tengo ningún tipo de vergüenza en decir que tengo miedo antes de todos los partidos», admitió el técnico, rechazando ser la bandera del otro fútbol, ese que reniega y desprecia al rondo como si fuera inútil.

«Yo pienso que me van a echar en el siguiente partido, por eso no me gusta tener la seguridad de nada», confesó Simeone, quien discrepó, con todo el respeto del  mundo, de Xavi, quien desde Catar, contó a Valdano que los equipos grandes deben tener un estilo propio, innegociable. «No se puede llegar a jugar como el Atlético. Yo no disfruto con los que se encierran», dijo, aunque subrayó que «la capacidad de liderazgo de Simeone es impresionante». 

RÉPLICA A XAVI

El Cholo lo tiene, aunque no le guste a Xavi. ¿Qué es jugar bien?, le preguntaron a Simeone. «Todos somos respetuosos con todas las opiniones. El fútbol es fantástico, todos tenemos razón. Hay diferentes formas de interpretar este juego. El mayor orgullo que tengo es potenciar a los futbolistas que tengo. Cuando sea seleccionador algún día, si lo soy, entonces potenciaré la idea que tengo por delante de los jugadores», precisó, anunciando que su equipo saldrá a ganar al Bayern.

«¿Cholismo contra Guardiolismo? Sinceramente no me detengo ni un segundo a analizar esta situación. No me preparo para gustar a nadie, me preparo para ganar, soy un empleado del Atlético y quiero ganar», explicó con energía, anunciando a los devotos de cholismo que abandonará el miedo en el vestuario del majestuoso Allianz Arena. «Vamos a seguir fieles a nuestro estilo. No hay mejor manera de estar tranquilos con nosotros mismos que ser nosotros mismos», enfatizó Simeone, segundos después de que sus soldados, aparecieron Torres y Gabi, el capitán, los mismos que antes del Barça y de la ida con el Bayern, dejaran su último mensaje al pueblo rojiblanco

«Una de las cosas que he aprendido, al volver a este equipo, es que mueren el uno por el otro. Pero literalmente», dijo el Niño que dejó de ser niño para ser hombre. «Tenemos unos ideales y no vamos a cambiar nada», prometió Torres.