El Espanyol se despide con una lastimosa derrota ante el Celta

El Espanyol se quedó este sábado sin completar una notable temporada. En el último partido de Liga y con la posibilidad, casi milagrosa, de alcanzar un puesto europeo, el equipo blanquiazul fracasó. Los condicionantes para acabar en esa séptima plaza que conduce a la Europa League si el Barça gana la Copa no se produjeron, pero el cuadro perico tampoco cumplió con su trabajo. Los hombres de Sergio González naufragaron ante un rival que jugó casi una hora con 10. Se dejaron remontar un mal partido y cerraron el campeonato con una pésima imagen.

De poco hubiese servido el triunfo en Balaídos. La lógica se cumplió y la goleada del Athletic en San Mamés ante el Villarreal le otorgaba la séptima plaza, pero no es lo mismo acabar la Liga con un buen sabor de boca que con una lastimosa derrota, sobre todo cuando el guion del encuentro acompaña. Solo con un punto más el Espanyol habría acabado en el octavo puesto y habría logrado su mejor puntuación de la Liga de la última década. Pero el equipo se descompuso y acabó cayendo ante un Celta diezmado que dejó a los pericos en la 10ª posición, lo que al menos permite a Sergio González y su cuerpo técnico cobrar una prima extra en su primer curso en Primera.

Empezó el Espanyol sufriendo, con Kiko Casilla como baluarte. El meta salvó un tanto de Santi Mina y estuvo también acertado ante Orellana, pero Sergio García volvió a sacar provecho de un balón largo para provocar el penalti y la expulsión del portero Sergio Álvarez (m. 20). La torpeza de Fontàs también benefició al capitán perico, que transformó la pena máxima y puso por delante a un Espanyol que jugaría con un hombre más el resto del choque.

EMPATE DE CABEZA

Las noticias procedentes de otros campos no eran positivas. El Athletic ganaba y la Real vencía en Vallecas. El Espanyol estaba fuera de Europa incluso ganando en Vigo. Puede que esa circunstancia causara una desconexión en un equipo que tenía todo a favor para llevarse el triunfo de Vigo. La victoria, además, permitía al bloque acabar con 52 puntos, la cifra más alta desde el 2005 con Lotina (61).

Casilla volvió a desbaratar una ocasión de Augusto (m. 26) y Sergio García acarició el segundo ante el guardameta del Celta (m. 32). No supo ampliar su ventaja el Espanyol y Hugo Mallo puso las tablas con un cabezazo después de otra parada de Casilla en tiro de Orellana (m. 37).

POSTE Y BATACAZO

Quedaba por delante la segunda parte con un hombre más ante un Celta animoso a pesar de las adversidades. Stuani, tras un pase de Sergio, superó a Rubén por alto y volvió a poner por delante al Espanyol (m. 48). Ese tanto, que debía afianzar a los pericos, acabó condenando a los blanquiazules, que desaparecieron del encuentro.

El Celta no se amilanó y se lanzó a por la remontada. Un cabezazo picado de Cabral en una falta botada por Nolito (m. 59) equilibró el duelo y todo se alteró en un minuto. Héctor Moreno cabeceó al palo (m. 76) y Nolito certificó la remontada gallega en la jugada siguiente. El Espanyol acabó entregado y fundido, pero la triste despedida no empaña una temporada convincente en la que el equipo catalán nunca sufrió y peleó por Europa hasta el último episodio.