Elefantes y hormiguitas

Hace 12 años llegaban todos juntos al Camp Nou para entregar 5.145 firmas. Este sábado volvieron a entregar cajas repletas de apoyos en las oficinas del club, pero esta vez por separado. Josep Maria Bartomeu, Joan Laporta, Agustí Benedito y Toni Freixa, aquellos jóvenes que aprovecharon el impulso del Elefant Blau Elefant Blaupara asaltar el mausoleo nuñista, son desde ayer rivales oficiales en el juego por el trono del rey de Europa.

Cuando accedieron al club en el 2003, prometieron dar los mejores años de su vida al Barça. Hoy el pelo les aguanta a todos igual, con alguna cana y algún kilo más, pero siguen con la mismas ganas y energía de volver al palco del club.

CAJAS, GRITOS Y SONRISAS

En una tarde tan caldeada como esta precampaña, fueron desfilando por el Auditori para entregar las cajas que contenían sus apoyos. Laporta, el más madrugador, derrochaba carisma y se mostraba confiado de imponerse a sus antiguos vicepresidentes. Tras él fueron pasando por la alfombra roja sus viejos amigos. Bartomeu llegó luciendo la mejor sonrisa, con la seguridad que le brindaba salir desde la pole. El siempre locuaz Benedito, miembro fundador del Elefant Blau junto a Laporta, llegó entre gritos de president mientras Bartomeu terminaba su comparecencia ante los medios. Freixa fue el último del póquer de pesos pesados en pisar las oficinas.

Pero en el Barça de elefantes también hay lugar para hormiguitas. «Las hormigas también existen. Me habéis dejado solo. Llevo el apoyo de 11 amigos», se lamentaba Ferran Estrada. Sin el acordeón con el que ameniza las comidas en el restaurante Salamanca, pero con el mismo salero y su característica barretina volvió a dibujar, como hace en todas las elecciones, la nota divertida.

Pero esta vez no ha sido el único animador de la precampaña. El trabajo de hormiguita permitió también a Seguiment FCB colarse en la fiesta de los Elefants. «Nunca una candidatura popular lo había logrado. El jueves solo teníamos 900 firmas. Nuestro objetivo, la grada de animación y la agencia de viajes», comentó Joan Batiste, portavoz de la lista menos convencional. Las bermudas y las camisetas del Barça chocaban con los trajes y camisas de sus rivales. Sus cánticos y risotadas contrastaban con la tristeza de Jordi Majó, que se quedó lejos del corte. «Jugamos un buen partido pero hemos perdido. Hay que saber perder», reconoció. Ahora empieza el partido de verdad. Bartomeu ha ganado la ida pero el resto espera forzar algún error para que haya partido.