El Barça recibe al Eibar sin distracciones

El Barça regresa hoy a la Liga en el Camp Nou con los cinco sentidos metidos en el campeonato -«no percibo distracción ni relajación en los jugadores», valoró ayer Luis Enrique-  en un duelo que se presta a las distracciones. Primero porque se viene de un nuevo parón de selecciones, con largos viajes y apenas un par de  días de entrenamiento, también porque el invitado que hoy pisa el estadio, el Eibar, es un recién llegado a Primera aparentemente asequible e ilusionado con su estreno en el santuario azulgrana; luego anda por medio el próximo récord goleador de Messi, que se encuentra a solo tres tantos de superar el legendario registro de Zarra (251 goles), la imbatibilidad de Bravo y, finalmente, sobrevuela ya en el ambiente el clásico del Bernabéu del día 25, una cita que focaliza el interés de medio mundo y que invita a descuidar inconscientemente el presente inmediato.

«Solo me preocupa el siguiente partido que tenemos», afirmó Luis Enrique, que alertó del potencial del equipo vasco. «El Eibar lo está haciendo muy bien. Es capaz de presionar alto y replegarse, usa bien la estrategia, es valiente, atrevido... Es un gran rival, a pesar de ser un recién ascendido», explicó el técnico azulgrana sobre el rival, que empató en San Mamés y solo cayó por la mínima ante el Atlético en el Calderón (2-1). «Puede ser uno de los equipos revelación de la temporada», vaticinó el preparador asturiano, que por una vez traicionó una de sus costumbres. «No es habitual que lo anticipe, pero os adelanto que Pedro va a ser titular», sentenció de forma inesperada, rechazando las informaciones que apuntaban a una dolencia del delantero canario, que esta semana se perdió los entrenamientos del martes y miércoles. «Ha entrenado todos los días que tenía que hacerlo y al nivel que debía; está al cien por cien».

ESPERANDO A VERMAELEN / Pues con Pedro en el once inicial saltará el Barça, que esta semana también ha recuperado a Rafinha y solo mantiene la duda de Douglas (sigue recuperándose de un golpe en el pie izquierdo) mientras que Vermaelen, pese a tener el visto bueno de los médicos, sigue con su puesta a punto. «Está mejor. Lleva una semanita entrenando al mismo ritmo que los demás. Es un caso especial, lleva mucho tiempo sin jugar pero seguro que nos ayudará», afirmó del central belga, que todavía no ha debutado.

A otro que se espera, con más ilusión si cabe, es a Luis Suárez, que anda mordiéndose las uñas ante el inminente final del castigo de la FIFA y su más que probable debut ante el Madrid. «No sé si está al cien por cien, al 80 o al 90, pero lo que sí está claro es que gordo no está, ni lo estuvo nunca pese a lo que se dijo. Está en forma desde hace meses», afirmó del goleador uruguayo, que viene de marcar dos goles con su selección, de recoger la Bota de Oro por sus 31 tantos de la pasada campaña y de asegurar que ya se encuentra «al cien por cien» físicamente.

EL CASO PIQUÉ / El técnico tampoco dio trascendencia alguna al incidente de Piqué con la Guardia Urbana. «Es un tema personal que no entro a valorar. Se ha equivocado y lo ha reconocido. No le afectará porque si hay alguien acostumbrado a los focos es él», aseguró del central, en un mensaje calcado al que lanzó el jueves el club a través del vicepresidente Jordi Cardoner. Luis Enrique también explicó que no ha decidido si Munir y Sandro se quedarán definitivamente en el primer equipo. «Depende de sus méritos», reiteró una vez más, a la vez que consideró positivo que ambos tengan la posibilidad de entrenar y jugar tanto con el primer equipo como con el filial. «Es algo que les va bien para curtirse».

ASAMBLEA DE COMPROMISARIOS / Mientras el equipo aspira a lograr un triunfo sin sobresaltos, la directiva  también desea tener hoy una plácida asamblea de compromisarios, en el Palau de Congressos, en la que Bartomeu se estrenará como presidente. Sobre la mesa andan temas espinosos, como la inexplicada dimisión de Rosell, las cifras del fichaje de Neymar y el juicio a Laporta por su gestión. De los socios depende.