El mejor 'Purito' del mundo

Para los chinos, 2010 es el año del tigre. Para los ciclistas, en cambio, el 2010 pasará a la historia como el año, el gran año, de Purito, la temporada en la que Joaquim Rodríguez, el noi de Parets, se convirtió en una figura de este deporte y desplazó nada menos que a Alberto Contador de la posición de número uno de la clasificación mundial. Aunque las comparaciones pueden ser muy atrevidas, el corredor catalán ocupa en el ciclismo la misma posición en la que Rafael Nadal se encuentra en el tenis o Tiger Woods en el golf.

Muchos se preguntarán: ¿por qué Alberto Contador, que gana el Tour, no es el número uno del mundo? Pues porque en el ranking de la Unión Ciclista Internacional no solo cuenta la ronda francesa, sino el cómputo de las principales carreras del mundo, entre pruebas de un día, una o tres semanas. Y allí prima la regularidad y los días de competición. Purito, con 82 jornadas corriendo con dorsal encima de una bici, ha batido todos los récords, a la vez que ha finalizado siempre entre los 10 primeros las principales pruebas organizadas por la UCI: París-Niza (7º), Volta a Catalunya (1º), Vuelta al País Vasco (4º), Flecha Valona (2º), Vuelta a Suiza (9º), Tour de Francia (8º más una etapa) y Vuelta a España (4º más una etapa).

Los precedentes

Por esta razón, Purito lidera la clasificación con suficiente diferencia sobre Contador (que lleva de vacaciones desde agosto) para tener ya asegurada, ocurra lo que ocurra en las pocas carreras que aún quedan por celebrar (el Mundial no puntúa en este ranking) la primera plaza mundial. Pasa a ser el primer corredor catalán en la historia que se convierte en número uno mundial. Desde que se estableció esta clasificación solo tres corredores españoles habían acabado el año ciclista como número uno del mundo: Induráin, Valverde y Contador (2009).

«He entrado en la historia del ciclismo. Es algo impresionante porque es una clasificación muy difícil de ganar. Tienes que estar todo el año al ciento por ciento», afirma feliz el ciclista de Parets del Vallès.

¿Qué ha sucedido para este cambio en la vida deportiva de Purito? Él era una pieza vital en el Caisse d'Epargne, el mejor ayudante de Valverde. Sin embargo, Rodríguez, que ya ganó la medalla de bronce en el último Mundial, quería más, necesitaba saber si servía como jefe de filas. Por ello aceptó la oferta del Katusha de Rusia, que lo nombró líder de la escuadra. Y Purito no ha defraudado. Solo una «contrarreloj que no tiene justificación alguna, en un día desastroso que no tiene perdón», en Peñafiel, hace una semana, le impidió luchar por la victoria en la Vuelta.

Purito, a los 31 años, en un ciclismo en el que cada vez prima más la veteranía, sabe que debe mejorar en la contrarreloj, encontrar la posición idónea. Pero ya ha dejado de ser aquel joven que atacaba a los viejos en los entrenamientos y que cuando llegaba a la cima del puerto los esperaba haciendo ver que fumaba un puro. De allí un apodo que lo ha hecho famoso. «Ahora hasta hay quien ha olvidado que me llamo Joaquim», bromea.