MEDIOAMBIENTE

El gran atlas de la vida marina cataloga 20.000 nuevas especies

2.700 científicos han participado en el inventario, que celebra sus primeros 10 años

ANTONIO MADRIDEJOS / Barcelona

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El mayor inventario realizado hasta la fecha sobre la biodiversidad de los océanos, el Censo de la Vida Marina (conocido con las siglas inglesas COML), ha localizado en 10 años de trabajo miles de especies cuya existencia no se conocía y sugiere que otras muchas miles, millones si se cuentan microorganismos, están pendientes de ser descubiertas, incluso en parajes inhóspitos con temperaturas extremas o sin luz. El censo, accesibleon lineen buena parte (www.coml.org y www.iobis.org), se irá ampliando en los próximos años, pero la primera gran evaluación, presentada ayer en Londres, ha catalogado 250.000 especies seguras -unas 20.000 más que hasta ahora- y otras 6.000 potenciales.

En el COML, según subraya un comunicado, han participado 2.700 científicos de 80 países que invirtieron más de 9.000 días en 540 expediciones, además de innumerables días de trabajo en el laboratorio y en archivos. El trabajo ha tenido un coste de unos 500 millones de euros.

El censo muestra una gran riqueza desde las costas a los fondos abisales y desde el ecuador hasta los polos. La diversidad queda demostrada por los casi 30 millones de observaciones realizadas, que han dado lugar a 80.000 páginas web. Según los autores, en Europa solo se conocen el 10% de las especies que existen (sin contar microorganismos), mientras que el porcentaje aumenta en África meridional (35%), la Antártida (60%), Japón (70%) y Australia (80%). Por citar algunos casos, cada año se descubren 130 nuevas especies de peces, 800 de crustáceos y 400 de moluscos. Entre las incorporaciones más destacadas de los últimos años destaca un cangrejo yeti abisal y una langosta de tres kilos.

LA AMENAZA HUMANA / Pese a la exuberante biodiversidad marina, dicen los autores, son también incontables los seres vivos que se encuentran amenazados por las actividades humanas. «El hombre tiene un impacto mucho mayor de lo que habíamos imaginado», resume uno de los coordinadores del censo, el canadiense Boris Worm, de la Universidad Dalhousie. Por poner un ejemplo, el 40% del plancton ha desaparecido en los últimos 50 años.