REDADA EN BARCELONA

La investigación de la mafia china se centra en si había menores en los burdeles

J. G. ALBALAT / A. BAQUERO
BARCELONA

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La investigación de la red de prostitución dirigida por la mafia china que fue desarticulada el lunes todavía está abierta y se intenta esclarecer si en los locales trabajaban también menores de edad. Fuentes conocedoras de las pesquisas aseguraron ayer a este diario que los Mossos d'Esquadra habían detenido a 22 personas (una de ellas de nacionalidad española) y que los agentes habían registrados una veintena de establecimientos, la mayoría en la ciudad de Barcelona, aunque también en poblaciones como Sabadell. Está previsto que hoy pasen a disposición judicial los arrestados. Por ahora hay secreto de sumario.

La trama estaba siendo investigada desde hace meses. La primera pista surgió a raíz de la macrorredada que la policía autonómica efectuó en mayo del 2009 en decenas de talleres textiles ilegales de Mataró, así como de otras investigaciones que se realizaron posteriormente. La documentación incautada en la capital del Maresme ha sido la veta que ha permitido a los Mossos llevar a cabo el lunes una de las más importantes operaciones contra la mafia china en Catalunya. La dificultad estriba en detallar quién es el cabecilla real de la red. No se descarta la existencia de varios clanes.

PRISIÓN POR TRÁFICO ILEGAL / El esfuerzo policial en la persecución de las mafias chinas que opera en Catalunya tiene su contraprestación a nivel judicial. La Sección Tercera de la Audiencia de Barcelona ha condenado a seis años de prisión a Francisco Zheng Zheng por un delito contra los ciudadanos extranjeros. El imputado, según el fallo judicial, se dedicó entre mayo y noviembre del 2009 a trasladar a Francia e Italia a chinos que residían en la provincia de Barcelona y se encontraban en situación irregular en España.

El condenado cobraba de cada una de las personas que captaba cantidades que oscilaban entre 1.500 y 1.000 euros, dependiendo del lugar de destino y si viajaban solos o en grupos de hasta cuatro personas. El transporte lo hacía por carretera utilizando su propio vehículo. La sentencia detalla dos viajes que salieron desde Santa Coloma de Gramenet hacia Francia.