explotación sexual de inmigrantes en la capital catalana

Auge de la prostitución china en 100 pisos clandestinos de BCN

Detención de una mujer china en una acción de los Mossos en el local Estética 63, de Bailèn, 36, en el 2011.

Detención de una mujer china en una acción de los Mossos en el local Estética 63, de Bailèn, 36, en el 2011.

EL PERIÓDICO / BARCELONA

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La Policía Nacional ha detectado que la prostitución china ha experimentado en los últimos años un importante auge, especialmente en pisos clandestinos de Barcelona, donde están siendo explotadas, como mínimo, entre 150 y 250 mujeres de esta nacionalidad en un centenar de viviendas controladas por chinos.

Dos tercios del total de 300 pisos que acogen esa actividad contabilizados por la policía en la capital catalana siguen estando, no obstante, bajo el control de españoles que explotan a mujeres de la Europa del Este. El porcentaje de pisos chinos es, sin embargo, el que más ha aumentado en los últimos años.

Así lo ha explicado a Europa Press, Alí Mohamed, inspector jefe de la Sección Primera de la Unidad Central contra las Redes de Inmigración y Falsedades Documentales (Ucrif), que dirige un grupo de 50 policías dedicado a la lucha contra la explotación sexual en Catalunya.

Pese a que siempre han existido los pisos donde se ejerce la prostitución, ahora su cantidad alcanza ya la de los clubs de alterne clásicos, que también son unos 300 actualmente en Barcelona. En este tipo de locales, las meretrices provienen principalmente de la Europa del Este, de Nigeria y de China.

El inspector asegura que lo que ha cambiado son las nacionalidades, porque si antes las prostitutas explotadas por mafias eran mayoritariamente de Sudamérica, ahora dos tercios de las víctimas potenciales son de Rumanía, Bulgaria, Ucrania y Rusia.

El aumento en los últimos años de la prostitución china, que era casi inexistente hace unos seis o siete años, se explica porque las organizaciones del país asiático «rompen las tarifas con precios más asequibles, más baratos».

LUGARTENIENTES / «El flujo migratorio de ciudadanos chinos antes era básicamente para explotarlos en talleres textiles, posteriormente se desplazó a las peluquerías con el llamado final feliz y ahora se centra en la explotación sexual en pisos», argumenta el inspector, que sospecha que quienes dirigen estos pisos son estructuras mafiosas afincadas en China y que tienen en Barcelona a lugartenientes y controladores que muchas veces ni se conocen entre ellos. «Cada uno tiene un rol determinado, lo que dificulta las investigaciones porque se trata de estructuras opacas».

Es muy difícil que las mujeres denuncien su situación y sigan adelante con un proceso judicial porque muchas veces no son conscientes de que están siendo sometidas por una estructura mafiosa, ya que en su país han sido obligadas a prostituirse desde que eran menores.

De hecho, una vez en Europa, muchas de estas mujeres se sienten agradecidas con las personas que las han traído, y eso va acompañado de que las medidas de control son menos duras que en China: «Son sumisas, asumen su papel y en muchos casos están agradecidas por haberlas traído a España», asegura.

El inspector advierte que en esos pisos, pese a parecer que reina una paz absoluta, sigue existiendo la explotación de la mujer, «en unas condiciones lamentables, porque no tienen libertad para decidir su vida».