La nueva Sagrada Família atrae a 20.000 personas en cinco horas

Las piedras, centenarias o contemporáneas, de la Sagrada Família y quienes las reproducen o gestionan están acostumbrados a las multitudes. A diario son millares las personas que recorren por dentro y por fuera el icono turístico convertido en el símbolo más conocido de Barcelona. Pero ayer fue un día distinto. Hubo muchos más visitantes y casi todos ellos ciudadanos de aquí. Eran vecinos de la capital o de otras poblaciones catalanas que decidieron redescubrir algo tan próximo como apartado de sus prioridades, como suele ocurrir. Apartado hasta descubrir con el Papa, la televisión y la prensa la espectacular nave central, recién acabada. En la primera matinal de cinco horas con los tornos del peaje de 12 euros de la entrada levantados fueron 19.980 las personas que recorrieron el bosque petrificado con la cámara del móvil o la réflex en la mano y la vista en las alturas.

No hubo aglomeraciones porque la enorme amplitud del recinto puede absorber a mucha gente. Sin embargo, la cola dio la vuelta a la manzana durante parte de la mañana hasta juntarse con el punto de entrada habilitado excepcionalmente en la fachada del Naixement, la construida por Gaudí, en la calle de la Marina. Entre las 9.00 y las 14.00 horas (por la tarde se volvió a cobrar billete) vieron el templo más del triple de las personas que lo hicieron de media cada día del año pasado, 6.350. Tal es el renovado interés que despierta el templo iniciado hace 128 años y al que todavía le quedan, sin los ingresos turísticos no fallan, otros 15 o 20 para culminar el quimérico proyecto de Antoni Gaudí.

RECORRIDO LIMITADO / Piezas musicales comoEl cant dels ocellso elVirolaiamenizaban la visita mientras por los mismos altavoces se citaban en cinco lenguas textos bíblicos y se invitaba a los presentes, con un éxito relativo, a rezar elParenostresiguiendo la oración en catalán de Benedicto XVI de la ceremonia que ofició allí en noviembre.

La visita se redujo a la nave central y a las dos fachadas ya acabadas, la del Naixement para entrar y la de la Passió en Còrsega para salir, así com a la tienda de recuerdos, libros y carteles. Tanto el museo, como la cripta y los ascensores a las torres se mantuvieron cerrados. Los gestores del templo han previsto otras tres visitas matinales gratuitas los sábados de enero que quedan y no descarta ampliar la experiencia más adelante.

SOL PRIMAVERAL / Joan Rigol, presidente del patronato, explicó bajo un sol casi primaveral que contribuyó en gran medida al éxito de la iniciativa, que el principal objetivo del día de puertas abiertas era «que la gente del país se haga suya la Sagrada Família». Rigol añadió que se irá viendo en el futuro el modo de que los ciudadanos «puedan sentir próxima la basílica, aunque coincidiendo con lo primero que es: un centro de visita turística».

El año pasado el número total de turistas descendió respecto al 2009 hasta que la visita del Papa invirtió la tendencia. Pero no lo hizo lo suficiente porque a pesar del repunte de los dos últimos meses, el año se cerró con 2.317.349 millones, unos 75.000 menos que los 2.392.164 del año anterior. El templo espera que el efecto de la visita papal y el descubrimiento de la espectacular nave por televisión en medio mundo vaya en aumento en los próximos meses y años.