ENTREVISTA CON LA estrella

Pau Gasol: "A este equipo hay que exigirle pelear por el oro"

Pau Gasol, en el campus en el CAR de Sant Cugat.

Pau Gasol, en el campus en el CAR de Sant Cugat.

LUIS MENDIOLA
GRANADA

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Ha vivido un verano intenso en lo profesional para despejar su futuro en la NBA, pero muy relajado en lo personal, con unas largas vacaciones por primera vez en muchos años, desde el 16 de abril, cuando disputó su último partido de Liga, hasta el 23 de julio, cuando se inició la concentración de España. Después de cerrar una etapa de seis años y medio en los Lakers y comprometerse con los Chicago Bulls (22 millones de dólares, unos 16,5 millones de euros, por tres temporadas), Pau Gasol regresa con ganas a la selección, con la que no compite desde los Juegos de Londres. No es un reencuentro cualquiera. La presencia de Gasol (34 años y 2,13), por talento y capacidad de liderazgo eleva exponencialmente las posibilidades de España en el torneo.

-Regresa a la selección después de su ausencia en el Eurobasket de Eslovenia del pasado verano a causa de una lesión. ¿Cuáles son las sensaciones en su vuelta?

-Vuelvo con muchas ganas, me siento un privilegiado en todos los sentidos por estar aquí. El poder entrenar con estos jugadores cada día, competir con ellos, preparar un Mundial a su lado, es una experiencia impagable. Para un jugador de básquet no puede haber nada mejor.

-El pasado verano, la selección consiguió el bronce en el Europeo, a pesar de las notables ausencias con las que acudió (Pau Gasol, Navarro, Ibaka, Reyes). Que ustedes reaparezcan, ha disparado las expectativas sobre las medallas. ¿Cómo lo lleva?

-En Eslovenia se consiguió la medalla de bronce e hicimos un buen papel aunque no se pudo ganar. Creo que la imagen del equipo fue bastante buena y ahora volvemos unos cuantos que no pudimos estar el año pasado, aunque con eso no quiero decir que ya esté todo hecho. Lo que vales, tienes que demostrarlo en la cancha. ¿Que habrá presión? Así es, pero yo la veo como algo positivo. Quieres tener a los mejores jugadores en tu equipo y cuando lo consigues, pues mejor para todos.

-Después de casi 15 años, la mayoría de los jugadores mantienen el compromiso de cada verano con la selección. ¿Cuáles son las razones?

-El buen ambiente que se respira, la posibilidad de formar parte de un equipo que tiene un altísimo nivel. Y también, que lo disfrutamos. Nos lo pasamos muy bien. Aunque sea un esfuerzo personal, porque le restas tiempo a tu familia y a tu descanso, pasar un mes y medio juntos es lo mejor que podemos hacer en nuestra profesión. Y si además de pasarlo bien, ganamos, pues chapeau.

-Mucha gente afirma que estamos ante la mejor selección de la historia. ¿Lo comparte?

-Habrá que verlo. Es prácticamente el mismo equipo que hemos tenido en los últimos campeonatos y creo que lo hemos hecho bien hasta ahora. Solo hay que ver nuestra trayectoria. Pero cada campeonato es algo nuevo y tener a grandes jugadores no significa nada. No es una garantía para ganarlo. Y nuestro sueño y nuestro objetivo es intentar ganar este campeonato.

-¿Lo dice por lo que sucedió en el Mundial de fútbol? ¿Se lo toman como un aviso?

-No se trata de un aviso, sino simplemente de entender que o estás a tope o no ganas. Y si no estás a tope, los otros lo estarán. Y entonces dará igual que seas favorito al título o que tengas los jugadores que quieras tener. Al final tienes que estar al 100% y lo tienes que dar todo en la cancha porque si no te vas para casa. Y no tienes otra. Es verdad que se dan todas las otras circunstancias: tenemos mucha ilusión, es un campeonato que se juega en casa y mantenemos un grupo que siempre ha conservado la ambición en cada competición. Así que esperemos que en esta ocasión no sea diferente.

-La lista de Juan Antonio Orenga no admite apenas discusión. Solo podría debatirse la presencia de Ibaka o Mirotic para la plaza de nacionalizado. ¿Cómo lo valora?

-Son dos jugadores de gran calidad. Diferentes, pero ocupan una posición similar en la cancha y solo se podía escoger a uno. Mirotic puede salir más del aro. Serge es más atlético, más defensivo, pero ha progresado mucho en el tiro. Es un jugador muy completo que nos viene de maravilla y nos va a ayudar mucho en este campeonato.

-Ustedes tienen la reciente experiencia de vivir un campeonato en casa. Sucedió en el Eurobásket del 2007. ¿supone una ventaja para manejarse ante  la presión?

-Supongo que no será algo muy diferente a lo que vivimos entonces, pero sí que será una prueba para el equipo y para los jugadores para mantenerse concentrados. La Copa del Mundo es un torneo con mucha tensión y todo el mundo quiere tirar de ti: los medios de comunicación, la gente, la familia, los amigos... Así que deberemos hacer un esfuerzo psicológico importante para mantenernos centrados y no dejar que todas esas distracciones nos puedan comer algo de nuestro tiempo y nuestra energía. Tenemos que entender que habrá que estar muy centrados en el Mundial para jugar lo mejor posible.

-Por encima de todo, es usted una persona ambiciosa. ¿Cuál es el reto que se marca el equipo?

-Creo que por la trayectoria de la selección, no podemos escoger ya a estas alturas dónde lo situamos. El listón tiene que estar alto. No hay otra. España es una de las favoritas y creo que a este equipo se le ha de exigir darlo todo y luchar por el oro. Para este equipo el listón siempre está muy  arriba afortunadamente.

-¿Ganar este Mundial sería la culminación de esta generación?

-No me lo planteo así. Ganar aquí, sin duda, sería un gran éxito, una gran alegría para todos, pero es algo que tendremos que luchar mucho y que será muy difícil. Es posible que para muchos de nosotros sea el último campeonato y queremos aprovecharlo, aunque personalmente espero seguir jugando muchos más años y luchando por cosas significativas.

-¿Quiere decir eso que no se pone límites en su futuro con la selección?

-Si estuviera bien en los Juegos de Río, no me importaría ir. A mí siempre me gusta venir a la selección. Lo que ocurre es cuando llegas a este punto de mi carrera, un punto más cercano al final, tienes que ser más cerebral a la hora de escoger en lo que participas. A veces pongo un ejemplo: las ruedas de un coche tienen un número de kilómetros determinado; otra cosa es cómo puedas utilizarlas. Ahora a mí me toca ser más cerebral y ver cómo las utilizo.

 -Todo el mundo sueña con una final entre España y EEUU. Después de ver la lista y las bajas con las que acuden, ¿los ve accesibles?

-No voy a descubrirlos ahora. Se trata de jugadores muy buenos, con mucho talento. Pero es un equipo prácticamente nuevo, que apenas ha jugado junto y nosotros sí. Habrá que ver si nos basta con nuestra experiencia, nuestra química y nuestra calidad como jugadores. Pero hablamos de un hipotético partido muy al final del campeonato y nosotros no podemos obsesionarnos con ese partido. Sería un error. Tenemos que hacer nuestro torneo, llegar lo mejor que podamos e intentar ganar. Me da igual que sea contra EEUU o contra otra selección. Y si los encontramos en el camino, debemos jugar como hemos jugado siempre contra ellos sin complejos y con toda la valentía del mundo.

-¿Supone una motivación especial para usted volver a competir al máximo nivel, después de dos años negros en los Lakers?

-No es tanto una motivación especial como la posibilidad de seguir compitiendo. Este año he podido estar a un nivel individual bastante acorde a lo que ha sido toda mi carrera. Es verdad que el baloncesto es un deporte de equipo, pero sí que quiero recuperar las buenas sensaciones del básquet, de seguir jugando en un gran equipo, con grandes jugadores, de conseguir el máximo nivel y darlo todo.

-El grupo con el que se encontrarán es bastante exigente.

-Bueno, mejor. Yo prefiero que el equipo empiece con la tensión del campeonato y que nos veamos contra equipos de nivel, porque eso nos hará estar preparados para lo que viene después. Al final, si quieres ganar un campeonato, tienes que ganar a todos.