Pereiro, qué grande

Hay días en los que recibes malas noticias y si te llegan cuando estás lejos te pones triste y sufres por no poder ayudar. Hay días en que te pasa de todo y hasta te buscas una dedicatoria. La mía, aparte de otras u otra persona, sería también paraMonsieur Fortasec, que hoy gracias a su genial fórmula, no solo me ha permitido tomar la salida, después de una noche nefasta, sino que me ha servido de estímulo para cubrir un día que, habiendo estado enfermo, era para enviarlo todo a hacer puñetas. Me he perdido, al saltarme una indicación de paso, he caminado, a pie, entre maleza y una vegetación que recordabaExtremaduray en la que debía ser la bajada salvadora hacia la pista reglamentaria, una piedra me ha destrozado el freno trasero. Sin frenos y ni mucho menos a lo loco; es decir, más en planVerano Azul que al estiloTitan Desert, he tenido que efectuar el vertiginoso descenso de 20 kilómetros que conducía a meta, donde no podía ni saludar a la muchedumbre que me superaba entre piedras sueltas, porque de soltar solo una mano del manillar el castañazo estaba asegurado.

Pero ya está bien de hablar de uno, porque hoy hemos ganado. Sí. Mi equipo,Tarragona 2017, que nos ha convertido en embajadores de la candidatura para organizar losJuegos del Mediterráneo, ha conseguido el triunfo gracias a nuestrocrack, que no es otro queÓscar Pereiro, quien, por cierto, luce en su maillot la publicidad deEL PERIÓDICO. Por lo tanto, aquí, en el diario, también nos anotamos su éxito. Ha sido su primera victoria ciclista desde que en julio del 2006 se alzó con el triunfo en elTour. Ha sido el primer triunfador de la ronda francesa, de la maravillosagrande boucle, en la prueba. Y él está entusiasmado.

Hace ya tres años, en el Tour, cuando Pereiro era cronista de este diario, hablábamos de planes de futuro y él me dijo que cuando dejara el ciclismo de carretera quería seguir practicando deporte de alta intensidad. "Pues te vienes conmigo a la Titan". "Esto está hecho", prometió. En otoño del 2009 tuvo dudas sobre si continuaba al máximo nivel o no. "Que lo dejo y en mayo me apunto a la Titan". Ya estaba todo hecho cuando recibió la oferta del equipo deAlberto Contador. Y, claro, le ilusionó fichar por el Astanapara estar al lado del pinteño. Así que su debut en la Titan se tuvo que aplazar un año.

Mientras, Pereiro, se apuntó al fútbol y hace apenas un mes comenzó a entrenar con evidente dureza para llegar en forma a una carrera, con una dinámica distinta a todas, donde coinciden corredores profesionales con cicloturistas. "¿De verdad que solo ha entrenado un mes? ¡Pues cómo va!", se sorprendió el líder de la carrera,Roberto Heras. "Voy a vencer en una etapa y el año que viene vuelvo para ganar la Titan". La promesa la efectuó el martes por la noche en la mesa donde comparte la cena con el resto del equipo:Miquel Àngel Iglesias(tercer clasificado en lacategoría Master),Sergi Esteve(tercero en sub-23 pues solo tiene 20 años y es el más joven de la prueba),Rebeca Triquell,Helena Buigues, nuestro mecánicoSergi,eldoctor Bofarully quien suscribe estos textos. De momento, ya ha cumplido la primera parte.

Mañana nos despedimos deMarruecos, embarcamos enNador, cerca de la frontera conMelilla, dormimos en ferry cruzando elEstrecho, ya que el sábado se disputa laetapa reina en Granada. El triunfo de Óscar ha sido la buena noticia en un día no muy feliz.