Luis Enrique: "Yo no lo llamaría crisis"

Luis Enrique, técnico del Barça, está convencido de que su equipo está listo, feliz, en plena forma y recuperado para afrontar con solvencia, seguridad y mucho optimismo las tres últimas jornadas de Liga y, por supuesto, la final de la Copa del Rey ante el Sevilla. El míster asturiano, que se congratula de jugar ya solo un partido por semana (“aunque hubiésemos querido jugar tres partidos por semana hasta el final”), considera que el ambiente en el seno de la plantilla es fantástico y que todos tienen muchas ganas de conseguir buena parte de los objetivos que se propusieron al acabar el año. “En efecto, como dice el presidente, conquistar el doblete, Liga y Copa, sería estupendo, pero todavía nos queda mucho y no será nada fácil”.

Preguntado si consideraba que la crisis liguera sufrida alrededor de la eliminatoria de Champions con el Atlético había dejado huella o si el equipo, tras las dos últimas goleadas, ha demostrado estar ya totalmente recuperado, Luis Enrique ha dicho: "Yo no lo llamaría crisis, no sé cómo lo llamaría, pero no lo llamaría crisis, pues más bien fue, repasados varias veces aquellos encuentros, falta de fluidez en nuestro fútbol, falta de acierto y suerte, sin duda, y, sí, aunque en fútbol nunca se puede asegurar, creo que no se volverá a producir un bajón así”.

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"UN DEPORTE IMPREDECIBLE"

Evidentemente, Luis Enrique insiste en que “el fútbol continúa siendo un deporte impredecible y, por tanto, nunca se puede asegurar que vamos a ganar los tres partidos que quedan y la final de Copa, sobre todo con la enorme tensión que rodea a este final de temporada, que dignificará aún más al campeón que logre imponerse pese a tanta presión”.

Respecto a aquel agujero negro, cuando el Barça perdió, de pronto, toda la ventaja que tenía, menos el ‘goal average’ frente al Atlético que es, de momento, lo único que le mantiene líder, Luis Enrique ha recordado, tal vez emulando aquella conferencia de prensa en la que afirmó con rotundidad (y era cierto) que “jamás he sacado pecho”, que “cuando éramos lideres con cierta ventaja siempre dije que había Liga y que hasta que matemáticamente no fuésemos campeones, no se podría hablar de título; también dije, cuando logramos estar 39 jornadas sin perder, que esa racha nos acercaría a los títulos, pero no significaba que ya los tuviésemos. Así que se ha demostrado que tenía razón. Sabíamos que nada iba a ser fácil y ahora estamos peleando por el doblete, que sería una gran conquista, sí. Una cosa sigue siendo real: somos los que mejor lo tenemos, seguimos en una situación privilegiada, dependemos de nosotros”.