'Masterchef' con anónimos resurge en TVE: logra su edición más vista con un casting lleno de personajes icónicos

'Masterchef' cierra esta noche una edición histórica en La 1 de TVE. Alberto, Ana, Andy, Iván y Luna lucharán esta noche por ganar la octava edición del talent culinario, que ha vuelto a conquistar a los espectadores, registrando su mejor temporada en cuota de pantalla desde que llegó a la cadena pública hace 8 años.

Concretamente, a lo largo de estas 12 semanas y sin contar las respectivas finales, el formato ha obtenido una media del 22,26% de cuota de pantalla y 2.896.000 espectadores, liderando en su franja horaria en todas sus entregas. De hecho, solo un programa de esta octava edición ha estado por debajo de la barrera psicológica del 20% (18,6% en su segunda gala).

El aumento del consumo televisivo por la pandemia del coronavirus y un casting con concursantes competitivos y capaces de dar juego y conflicto en las cocinas como Saray, Juana, Iván, José María y Andy, entre otros, han sido clave para que espacio de Shine Iberia ('Maestros de la costura', 'Improvisando') haya conseguido estos sobresalientes datos.

La espectacular mejoría de 'Masterchef' se aprecia mejor si comparamos los datos de su octava edición con los de la séptima. El buque insignia del área de entretenimiento de TVE gana 7,56 puntos de share y más de 1.065.000 espectadores de media respecto a la temporada en la que Aleix Puig se alzó como ganador. Es más, siete de sus 12 entregas ya emitidas consiguieron un dato igual o superior al 22,26% que 'Masterchef 8' ha promediado durante estas semanas.

'Masterchef 8': la edición del máximo histórico de share en una gala habitual

'Masterchef' también ha registrado su máximo histórico de cuota de pantalla en una gala habitual. Sin contar los datos de las grandes finales y teniendo en cuenta que no ha tenido grandes rivales en esta temporada, el talent de Shine Iberia logró un 24,6% de cuota de pantalla (3.096.000 espectadores) en la décima gala de su octava edición, casualmente la primera que se grabó tras el parón por la crisis sanitaria del coronavirus.

Dentro de este contexto de registros de las galas que no son grandes finales, esta octava edición cuenta con el honor de tener las cuatro emisiones con mayores cuotas de pantalla de toda la historia de la adaptación española del formato.