Un secuestro con final de boda

periodico

El secuestro de los españoles María Concepción Marlaska y Ángel Sánchez, que quedaron el sábado en libertad tras casi un mes de cautiverio en manos de delincuentes comunes colombianos, tendrá un final feliz porque terminará en boda. Al finalizar este domingo una rueda de prensa en la residencia del embajador de España en Bogotá, Sánchez, de 49 años, ha aprovechado para declararse a su novia, de 43, con la que tiene una relación desde hace siete años.