Amor a contrarreloj: 'Speed dating' en un tren para desafiar a San Valentín (no apto para enamorados)

Este martes 13 de febrero, además del día de la mala suerte, también ha sido el día de San Solterín, una festividad que se celebra siempre el día antes de San Valentín y que rinde homenaje a todos los solteros y solteras que desafían las convicciones sociales del 14 de febrero, y este año también, las malas vibras del martes 13. 

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Reivindicar la soltería se ha vuelto una práctica tan importante como celebrar el amor, pero no siempre es tan fácil porque "la sociedad está hecha para la vida en pareja", sostiene Melanie, una joven soltera que decidió empezar a viajar sola después de una ruptura. "Empecé a viajar sola y me di cuenta de que muchas cosas están pensadas para dos o más personas: las habitaciones de hotel, las comidas en el supermercado y muchos otros aspectos", explica a este medio.

Sandra también aprovechó su soltería para coger las maletas e ir a dar la vuelta al mundo. Tiene 37 años y vive sola, sin pareja. "Soy una mujer muy independiente y me gusta estar sola, no me cierro al amor, pero solo quiero estar con alguien que de verdad merezca mi compañía", reivindica con la certeza de que le gustaría formar una familia, pero tampoco se presiona si no lo consigue. 

A esta conversación se une Samuel, un riojano de 24 años que nunca ha tenido una pareja seria y busca encontrar un chico con el que construir una relación afectiva más consolidada: "Está bien conocer gente y probar cosas, pero tengo ganas de algo más firme", explica.

Melanie, Sandra y Samuel son solo tres de los muchos solteros que durante la mañana de este martes 13 (día de San Solterín) se han subido a bordo de un tren de Ouigo para vivir la experiencia del 'speed dating' (citas rápidas), una iniciativa de la empresa ferroviaria que busca que estos 'singles' encuentren el amor "a contrarreloj" horas antes del día de San Valentín. 

'Speed dating', citas rápidas

El concepto 'speed dating' se ha popularizado en los últimos años y cada vez es más común encontrar esta propuesta en diferentes bares de las grandes ciudades, como Barcelona. Se trata, como bien dice el nombre, de tener varias citas rápidas -de unos 10 minutos- en un mismo día para conocer gente de forma sencilla. Es tan sencillo como someterse a una cita a la velocidad de la luz para conocer a otros solteros, donde si no surge la chispa del amor inmediatamente, puedes probar suerte con otro soltero. Sin miedos ni compromisos, como ocurre con las aplicaciones de citas: 'swipe right' o 'swipe left'.

"Yo lo he probado varias veces y, aunque en la mayoría de los casos no encuentras al amor de tu vida, la verdad es que pasas un buen rato y te llevas amigos", reconoce Juan Pablo, un soltero que se ha subido al tren del amor desde Barcelona y que ya ha participado en programas como 'First dates' antes de unirse a este plan de San Solterín.

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Tercera edición

Ouigo hace tres años que organiza un encuentro de 'speed dating' a 300 km/h cada 13 de febrero, en las vísperas del día del amor. La empresa, que abre esa posibilidad a las personas que viven en Barcelona, Zaragoza, Valencia y Madrid, prepara un evento con citas durante todo el día en la capital, que empieza por trasladar todos los participantes desde las tres ciudades a Madrid en un tren donde ya empiezan a tener 'speed dates' entre ellos.

"De camino a la comida en el restaurante, que es su primera actividad todos juntos, los 'singles' van conociéndose a través de estas citas rápidas en los vagones del tren", explican los organizadores del evento. "Cada año surge el amor. Siempre hay alguno que no vuelve a su tren porque se queda en Madrid un poco más", añaden entre risas. 

Para esta edición la empresa ha recibido más de 300 solicitudes, pero solo hay plazas para 60 de ellos, que deben repartirse entre las cuatro ciudades participantes. "De todas las propuestas que recibimos -por redes sociales- elegimos los más originales y los que tengan el perfil abierto. Después los dividimos por rangos de edad y preferencias sexuales para que haya una coherencia", explican desde Oiugo. 

Un viaje sentimental

En Barcelona, poco antes de las 11 de la mañana, 20 solteros y solteras han embarcado en un Ouigo para buscar el amor a alta velocidad, mientras recorren la diversas provincias de España. Muchos eran de Barcelona y de localidades cercanas, otros vivían en la capital catalana, pero eran de otros puntos del país -como Galicia y La Rioja- y algunos llevaban apenas unos meses en la ciudad y han visto esta iniciativa una oportunidad para conocer a gente. 

Los solteros se han enfrentado nada más subir a bordo a un carrusel de citas vertiginosas, con apenas unos minutos para conversar y conectar, donde las primeras impresiones lo eran todo. Algunos flechazos han surgido de forma inesperada, mientras que otras interacciones no han logrado generar la chispa deseada. Lo que es evidente es que ha habido momentos de todo tipo: divertidos, incómodos y, en algunos casos, incluso románticos.

Amor a primera vista

Este último caso es el de Lara y Florencia, que han hecho 'match' enseguida. Las dos buscan un "amor libre" y coinciden con haber tenido relaciones abusivas y experiencias "tóxicas" que les ha hecho replantearse la soledad y acudir a terapia. "Ahora me veo capaz de querer de verdad y de poder estar con alguien, porque estoy bien conmigo misma", reconoce Lara, feliz por haber conectado tan rápido con Florencia, una gran fan del mundo de la astrología.

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Entre lecturas de horóscopos, Florencia -que hace pocos meses que ha emigrado desde Argentina- reflexiona sobre al amor: "Yo entiendo el amor como una cosa incondicional y para siempre, aunque eso no signifique que vayas a estar siempre con una persona o con algo". Florencia es pansexual y cree que el "amor es el motor que nos mantiene vivos y nos hace vivir", dice que es una necesidad como "seres sociales" que somos. 

Citas exprés y flechazos fugaces

A medida que avanzaba el trayecto, los vagones del Ouigo se han ido convirtiendo en escenarios insólitos de citas 'express' donde las primeras impresiones y la química han sido claves para encontrar esta anhelada conexión. ¿Es suficiente 10 minutos para ver si hay conexión con alguien? La mayoría de los 'singles' a bordo del tren cree que no, pero todos coinciden en que este tiempo es suficiente para ver con quién seguro que no existe afinidad.

Madrid, la ciudad del amor (o no)

Tras el trepidante viaje, los supervivientes del 'speed dating' han aterrado en Madrid, donde les esperaba una segunda ronda de citas en un local secreto con el resto de solteros de Valencia, Zaragoza y Madrid, mientras disfrutaban de una comida antes de seguir con las actividades previstas por la organización.

Allí, entre copas y risas, algunos han encontrado la conexión que buscaban, mientras otros se han consolado con la camaradería de los que también habían desafiado a San Valentín. Y así, al final de la noche, algunos corazones se habían enamorado, otros se habían hecho amigos y otros simplemente habían disfrutado de una experiencia diferente.

¿Final feliz o continuará...?

Más allá de encontrar el amor -algo que solo algunos afortunados han logrado- las horas a bordo del tren y en Madrid han servido para debatir y conversar sobre diferentes formas de ver y entender el amor, el sexo, el género o los tipos de relación y la exclusividad. Un mundo completamente nuevo para algunos y más conocido para otros, donde todos han podido aprender algo nuevo, además de conocer nuevas personas. "Me lo he pasado genial, ojalá poder repetir el año que viene. Iba sin expectativas y he alucinado", cuenta Carlos, que forma parte del grupo que esperaba en Madrid.

Solo el tiempo dirá si las flechas de Cupido disparadas a 300 km/h alcanzarán su objetivo y se traducirán en relaciones duraderas. Sin embargo, la experiencia ha demostrado que el amor puede surgir en los lugares más inesperados, incluso en un tren a toda velocidad. Lo importante es haber desafiado la tiranía del romanticismo y haber abierto la puerta a nuevas formas de celebrar la soltería.