50 segundos al año

Confirmado: viajar en avión te mantiene joven

Un experimento realizado en 1971 demuestra que, además, volar en dirección este rejuvenece más que hacerlo hacia el oeste

Los aviones doblan su velocidad por este motivo

Einstein predijo esto… y se está cumpliendo

Pasajeros dentro de un avión comercial.

Pasajeros dentro de un avión comercial. / Pixabay

Carla Torres

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Nos pasamos la vida buscando remedios para frenar el envejecimiento: las arrugas, el cansancio, la caída del pelo... Si saber que, algo que seguro que hemos hecho varias veces en nuestras vidas, logra mantenernos jóvenes sin ni siquiera ser conscientes.

Se trata de viajar en avión. Sí, coger un vuelo logra frenar nuestra vejez. Y, de hecho, no se trata de un descubrimiento nuevo. Es algo tan antiguo como la teoría de la relatividad de Albert Einstein, por la que se establece que el tiempo transcurre más lentamente para los objetos que se mueven a gran velocidad.

Esto se conoce como la dilatación del tiempo. Un suceso que es muy pequeño en la vida cotidiana -es totalmente imperceptible-, pero cuya medición se puede calcular con una herramienta única: los relojes atómicos.

Dos vuelos, dos rumbos distintos y un reloj atómico

Es precisamente este artificio el que demostró hace años que los aviones nos hacen más jóvenes. O, mejor dicho, nos mantienen más jóvenes. En 1971, el físico Joseph Hafele y el astrónomo Richard Keating realizaron un experimento para medir la dilatación del tiempo en aviones comerciales.

El experimento consistió en volar cuatro relojes atómicos sincronizados en aviones comerciales y comparar el tiempo que marcaban con el de un reloj atómico que se quedó en su laboratorio en Washington DC. Cada avión, con dos relojes, tomó un rumbo distinto, uno en dirección este y otro, oeste.

Cuando los aviones regresaron, se descubrió que los relojes estaban retrasados en comparación con el que se quedó en tierra. El retraso era de aproximadamente 270 nanosegundos, lo que equivale a unos 50 segundos en un año.

Los resultados obtenidos confirmaron la teoría de la relatividad de Einstein y demostraron que el acto de viajar altera, de forma casi inapreciable, la percepción del tiempo. Por lo tanto, también nuestra vejez.

Volar hacia el este, rejuvenece más

Además, el efecto de la dilatación del tiempo es relativo. Un pasajero en un avión que vuela hacia el este envejecerá más lentamente que un pasajero en un avión que vuela hacia el oeste, pues los dos aviones tenian nanosegundos de diferencias entre ellos.

Sin embargo, es importante señalar que el efecto de la dilatación del tiempo es muy pequeño. Para que un vuelo de avión tenga un efecto significativo en la edad de una persona, tendría que durar varios años.