¿Cómo puedes dejar la vitrocerámica impecable aunque esté muy sucia?

A la hora de cocinar y de comer se manchan electrodomésticos, utensilios y mobiliario de la cocina, una habitación que se suele usar a diario varias veces y cuya limpieza puede convertirse en una ardua tarea, porque se suele acumular mucha grasa y suciedad, sobre todo en la placa de la vitrocerámica, además de en el horno y la campana extractora. No obstante, existen multitud de trucos para facilitar esa engorrosa labor.

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En los anuncios de televisión todos nos quedamos boquiabiertos al ver cómo brillan las encimeras y vitrocerámicas que aparecen en los mismos. Si la tuya no luce así y ansias recuperar su brillo inicial, apúntate el siguiente truco. Tu aliado principal para la limpieza de tu vitrocerámica será la pasta de dientes. Lo único que tienes que hacer es aplicar el producto de higiene sobre tu vitro y extenderlo sobre la placa. Déjalo actuar durante unos minutos y, posteriormente, retira con la ayuda de un paño húmedo.

El resultado será sorprendente y tu vitrocerámica volverá a lucir como el primer día que te la instalaron. Presume de una vitrocerámica de anuncio gracias a la pasta de dientes.