Detenido un joven por intentar atacar con perros peligrosos y un cuchillo a unos mossos en L'Hospitalet

Los Mossos d'Esquadra detuvieron este miércoles a un joven de 23 años en L'Hospitalet de Llobregat (Barcelonès) por atacar con un cuchillo y dos perros peligrosos a los agentes que lo habían denunciado previamente por intentar escaparse con un patinete eléctrico que no era suyo. El hombre se encaró inicialmente a los agentes y no se quería identificar.

Cuando le requisaron el patinete por no poder demostrar su propiedad y le denunciaron por desobediencia, fue a su casa y volvió con dos perros de raza peligrosa a los que atizaba para atacar a los agentes. Cuando fue reducido por los policías, intentó clavar un cuchillo en la axila de uno de los agentes. Finalmente, le denunciaron por intento de homicidio y atentado a la autoridad, además de requisar-le los perros.

Según la minuta policial, a la que ha tenido acceso la ACN, los hechos tuvieron lugar a primera hora de la mañana, sobre las 5.30 horas en las inmediaciones del mercado de Santa Eulàlia de L’Hospitalet. Dos motoristas de los Mossos vieron a un joven circulando con patinete eléctrico por una zona peatonal que, cuando los vio, cambió de dirección y aceleró. La patrulla le dijo que se detuviera, pero el joven se dirigió a gran velocidad hacia ellos y los esquivó. Los motoristas lo persiguieron con las señales luminosas y acústicas activados y lo pudieron interceptar en la calle General Prim, a donde acudieron más patrullas.

A partir de entonces, según la policía catalana, el joven se encaró a los agentes con actitud desafiante. Le registraron y no le encontraron ningún objeto peligroso ni documentación y no se quiso identificar. Poco después les dijo que tenía una foto de su carnet en el teléfono móvil, pero no la quería enseñar. Finalmente, le pudieron coger el teléfono y se le identificó como Hassan Rafael T.V., español de 23 años y vecino de la ciudad. Los agentes supieron que tenía antecedentes por tráfico de drogas, delitos violentos y robos con violencia. Al ver que el patinete tenía el número de bastidor borrado, el joven dijo que era de un amigo, sin quererlo identificar. Por ello, los agentes le requisaron el vehículo y le dijeron que si no podía acreditar su propiedad sería denunciado por apropiación indebida leve.

En ese momento el individuo se violentó, comenzó a insultar a los agentes y a decirles que se llevaría el patinete. Le advirtieron que iban a denunciarle por desobediencia a la autoridad. El joven, entonces, amenazó de muerte y les dijo que le esperaran 5 minutos. Un cabo de los Mossos cogió al joven por el brazo para que se fuera, el chico se encaró al policía y éste le dio un empujón para que mantuviera la distancia de seguridad, según los agentes. El joven cayó al suelo, pero se levantó y huyó corriendo volviéndolos a amenazar de muerte.

Sin bozal ni correa

Una patrulla lo siguió y avisó a las demás de que el joven había vuelto a salir de un portal con dos perros de raza peligrosa, ambos sin bozal y uno de ellos sin correa. El joven iba hacia las patrullas y gritando a los perros para provocarles para atacar a los policías. Les volvió a amenazar de muerte y ante esta actitud dos cabos desenfundaron sus pistolas y le advirtieron que abatirían a los animales si los perros atacaban. Al verlo, el joven intentó coger a los perros y comenzó a retroceder hasta su casa seguido de los agentes con las armas desenfundadas. Ante el portal de su casa, los policías le dijeron que llamara a algún familiar para hacerse cargo de los perros, pero nadie respondió la llamada al interfono.

Justo en ese momento, un vecino abrió la puerta de la calle y el joven aprovechó para entrar e intentar subir las escaleras corriendo. Fue interceptado por dos cabos, que intentaron sacar del pasillo estrecho del portal y separarlo de los perros, a pesar de su resistencia. Le intentaron inmovilizar cogiéndolo por los brazos, mientras el joven llamaba a los perros para que atacaran a los policías, a la vez que daba patadas para intentar huir. L

os cabos pudieron estirarle en el suelo, pero el joven sacó un cuchillo de la parte trasera de los pantalones e intentó apuñalar a uno de los policías en el lado izquierdo, justo debajo de la axila, donde el chaleco antibalas no le protegía. El cabo pudo esquivar el ataque dándole un golpe en el brazo y le pudo sacar el cuchillo, de 8,5 centímetros de hoja.

Libertad con cargos

Finalmente, con la ayuda de varios agentes, le pudieron inmovilizar y esposar, mientras el joven seguía llamando a familiares y amigos para que evitaran su detención. Así, bajó una hermana del chico y se llevó a los perros. Los agentes añadieron material de contención al joven para que no se hiciera daño a sí mismo y le comunicaron que estaba detenido por amenazas, intento de homicidio y atentado a la autoridad. Pasó una revisión médica al CUAP de L’Hospitalet y finalmente fue encarcelado en la comisaría, con medidas de contención porque seguía muy violento.

La intervención, que duró alrededor de una hora, no conllevó lesiones a ningún agente, pero los perros, uno de los cuales no tenía ningún tipo de identificación, documentación ni chip, fueron acogidos por la protectora de animales de Granollers.

El joven también ha sido denunciado administrativamente por tenencia de perros potencialmente peligrosos. Según ha podido saber la ACN, el sindicato USPAC se personará como acusación en la causa. El juzgado de guardia le ha dejado en libertad con cargos.

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