hasta octubre

Aplazado el juicio a los padres de Nadia Nerea por un cambio de abogado

La vista se celebrará los días 2, 3 y 4 de octubre, en lugar del 5, 6 y 7 de junio como esta previsto

Nadia Nerea, con sus padres Fernando Blanco y Marga Garau.

Nadia Nerea, con sus padres Fernando Blanco y Marga Garau. / periodico

J. G. Albalat

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La Audiencia de Lleida ha aplazado el juicio contra los padres de la niña Nadia Nerea, acusados de un delito de estafa, y ha señalado la vista para los días 2, 3 y 4 de octubre, tras el cambio de un letrado de la defensa.

Según han informado desde el Tribunal Superior de Justícia de Catalunya, hace unos días el abogado del acusado, Fernando Blanco, renunció a la defensa de su cliente. Por este motivo, la Audiencia de Lleida dio un margen de cinco días para la designación de un nuevo letrado.

Durante este plazo, el acusado no designó a ningún nuevo letrado, en una clara maniobra de dilación del proceso judicial, por lo que la Audiencia lo comunicó al Colegio de Abogados de Lleida para que adjudicaran a uno de oficio.

Una vez designado, el nuevo letrado solicitó a la Audiencia aplazar la celebración del juicio, dada la dimensión de la causa, que comprende 11 tomos y pidió el aplazamiento para "garantizar el derecho a la defensa de su representado". Blanco y su esposa, Margarita Garau, se enfrentan a seis años de prisión por un delito de estafa por haberse apoderado de 1,1 millones de euros.

Según la Fiscalía, los padres de la pequeña, que sufre una dolencia congénita, crearon en el 2009 una supuesta asociación para conseguir fondos y tratar a su hija de la enfermedad rara que padece, pero por la que su vida no corre peligro, con la que habrían recaudado en donativos ese importe superior al millón de euros. El dinero lo utilizaron el dinero en la compra de coches, viajes y otros bienes.

Además de los seis años de prisión, el Fiscalía solicita una multa de 9.720 euros para cada uno de los acusados.

Paralelamente, los padres fueron también fueron investigados por un presunto delito de pornografía infantil y exhibicionismo, aunque en este caso, ambos quedaron absueltos.

La niña vive ahora con una tía suya en un pequeño pueblo de Baleares, cerca del domicilio de su madre, que puede visitarla con asiduidad aunque le ha sido retirada la custodia. El padre, en cambio, está en prisión condicional.