El Gobierno asegura que las playas que lo necesiten recibirán arena

La huella del temporal Nelson ha obligado al Ministerio para la Transición Ecológica a acelerar los trámites para decidir en qué puntos de la costa catalana se ponen en marcha proyectos urgentes, por la vía de emergencia, para restaurar las playas tras las consecuencias de este episodio. "Donde se necesiten aportaciones de arena, se intervendrá", ha concretado el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, durante una visita a la playa de Premià de Mar, donde terminarán en breve unas obras para proteger una de las playas del municipio.

Morán ha destacado que en estos momentos hay 11 actuaciones en trámite en Catalunya y que se iniciarán más si son necesarias. "Es importante analizar cada caso antes de empezar unos trabajos", ha asegurado. De hecho, ha destacado la cantidad de "conocimiento acumulado" generado en Catalunya sobre los temporales en el litoral: "Es útil para decidir sobre qué espacios vale la pena intervenir".

Preguntado por el riesgo de que el mar engulla de nuevo a la arena, Morán ha detallado que es importante priorizar las actuaciones con "vocación de permanencia para un periodo de tiempo considerable". "Los ayuntamientos de Catalunya pueden ser un mascarón de proa que marque el camino para el resto de ayuntamientos del país a la hora de acometer planes de este tipo", ha afirmado.

El ejemplo de Premià

En Premià de Mar, además de aportar arena, se ha protegido la costa con una escollera, unas obras que el alcalde, Rafael Navarro, ha agradecido: "Protegemos nuestra costa y también el transporte público, en este caso las vías del tren". Después del último temporal, otros ayuntamientos del Maresme, como el de Cabrera de Mar, el de Vilassar de Mar, el de Badalona y el de Montgat han reclamado planes parecidos de forma urgente.

Morán asegura que ya se ha estudiado cada caso y que en los próximos días se anunciarán los proyectos que se van a llevar a cabo. Es clave tener en cuenta que parte de la arena perdida en la última semana, aún se puede recuperar: "A partir de mayo es cuando suele haber aportaciones naturales de arena". A partir de esta situación, se analizará el escenario para poner en práctica obras útiles y que lleguen a tiempo de cara a la temporada de verano.

"No afirmo que haya una solución óptima. Esto lo tenemos que ver porque el cambio climático puede borrar fácilmente lo que tienes previsto sobre el papel", ha especificado el secretario de Estado. Sin embargo, la idea es proteger las costas y también los servicios como la línea de cercanías, en este caso, con medidas que tengan una cierta durabilidad.

Adaptar el reglamento

El Gobierno está pendiente de aprobar la adaptación del reglamento de costas a la realidad climática, después de una sentencia del Tribunal Supremo. Lo más importante de esta modificación es determinar dónde se marca la línea del deslinde, que es el trazado que marca qué espacio queda bajo la zona marítimo-terrestre.

Esta línea delimita el espacio de la ribera del mar y es aquí donde el ministerio tiene competencias para modificar o desautorizar ciertas actividades privadas. La subida del nivel del mar y el aumento de la fuerza de los temporales obliga a adaptar esta frontera al escenario actual. ¿Esto significa que habrá expropiaciones de hoteles y chiringuitos forzadas? No tiene por qué. Se deberá analizar cada caso y definir cómo se actúa a partir del nuevo reglamento.