Investigación abierta

Requisadas 3,5 toneladas de hachís recién desembarcadas en una cala del Cap de Creus

Los mossos y la Agencia Tributaria también intervienen diversos coches para transportar la droga y 2.000 litros de combustible para que las narcolanchas volvieran a su punto de origen

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Mossos frustran el desembarco de 3'5 toneladas de hachís en una cala del Cabo de Creus

Mossos frustran el desembarco de 3'5 toneladas de hachís en una cala del Cabo de Creus / Mossos

Germán González

Germán González

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Nuevo intento frustrado de desembarcar droga en Catalunya. Agentes de los Mossos d'Esquadra y del Servicio de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria interceptaron el pasado 23 de enero 3,5 toneladas de hachís, dos furgonetas, otros dos coches y 100 bidones con más de 2.000 litros de combustible en una cala cerca del Cap de Creus. 

La operación comenzó sobre las 21.10 horas cuando uno de los helicópteros de Vigilancia Aduanera que controla las narcolanchas detectó una de ellas semirrígida que iba hacia Cala Culip, una playa pequeña en el norte de Cap de Creus y poco frecuentada en invierno. Además, los pilotos vieron que en la cala esperaban varias personas en coches y furgonetas.

Ante la posibilidad de que se tratara de un desembarco de droga se alertó a los mossos que desplegaron un dispositivo amplio para detener a los sospechosos. Algunos huyeron en la embarcación y otros a través del campo dejando abandonados dos coches y varios enseres personales. 

Los agentes localizaron una furgoneta de grandes dimensiones que se había accidentado mientras trataba de salir del camino de la cala y dentro había fardos de diversos tamaños con droga. En las escaleras de la playa se encontraron más fardos y en la arena 100 bidones de combustible para proveer a la embarcación que transportaba la droga y así poder volver a su punto de origen.

La policía investiga los objetos encontrados en la cala para tratar de identificar y tratar de atrapar a los sospechosos de este desembarco de droga. El dispositivo para llevarse los fardos, examinar los vehículos abandonados y perseguir a los que habían escapado duró hasta altas horas de la madrugada. La investigación sigue abierta tutelada por el juzgado de instrucción de Figueres.