Manresa

De conflictiva discoteca a gigantesco laboratorio natural, así es la transformación de Pont Aeri

Una hectárea de asfalto arrancada de la antigua discoteca forma parte de un proyecto pionero de renaturalización que busca devolver a la naturaleza aquello alterado por la intervención humana

Una de las discotecas más míticas de Catalunya empieza a desaparecer

Imagen de las obras en la finca donde se encontraba la discoteca Pont Aeri

Imagen de las obras en la finca donde se encontraba la discoteca Pont Aeri / Ajuntament de Manresa

Francesc Galindo

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Excavadoras y camiones trabajan alrededor de la antigua discoteca Pont Aeri de Manresa, en el sector de Can Poc Oli, para sacar más de una hectárea de asfalto. La acción forma parte de un proyecto pionero de renaturalización.

De conflictiva discoteca a gigantesco laboratorio de naturaleza, esta es la transformación que se está ejecutando en una finca pública de 5 hectáreas, donde un día se levantó la mítica discoteca, cerrada en 2001 por orden municipal.

Falta de presupuesto

El edificio de la discoteca, de momento, no se echa en tierra. El presupuesto es de medio millón de euros que el Ayuntamiento no tiene y ha solicitado una subvención para conseguirlo.

La carísima operación se debe al hecho que toda la cubierta de la grande antigua discoteca es de fibrocemento y, además, se dispusieron vigas enormes metálicas que habrá que retirar y transportar.

El derrumbe de la discoteca es la guinda del pastel, pero el conjunto del proyecto continúa adelante cómo ha explicado el regidor de Acción Climática, Pol Huguet. De momento, la acción más visible es la retirada del asfalto que cubría el gran aparcamiento donde antiguamente dejaban los coches los clientes de la discoteca.

Experimento para comparar

No se ha sacado todo, se ha dejado una pequeña zona que servirá como testigo. Con el tiempo se comparará la vegetación del entorno que no había sido afectada: la que nacerá una vez liberada la tierra del asfalto y la más próxima al asfalto que se ha dejado.

Pol Huguet explicó que lo que se está llevando a cabo es un experimento de renaturalización que tiene como base objetivar el proceso de devolver a la naturaleza aquello que había sido alterado por la intervención humana.

Borrar la huella humana

Así que el objetivo no se encuentra solo al final del camino, cuando la huella humana haya sido borrada, sino en todo el proceso para conseguirlo. Y espera que se consigan muchos datos que puedan guiar otras actuaciones de renaturalización en otros muchos puntos de la geografía.

Lo que se está haciendo en estas 6 hectáreas de terreno se califica de pionero porque hay otras actuaciones de renaturalización en espacios muy grandes o en otros de más pequeños, "pero nuestra singularidad es desarrollar una actuación media justa junto a una ciudad de 80.000 habitantes", explicó el lunes 15 de enero el regidor de Acción Climática.

Huguet recordó que se trata de un proyecto de largo recorrido y que los cambios no se verán de un día por el otro, porque la natura, afortunadamente, tiene sus ritmos.

Peces del río hacia la riera

De momento han empezado a crecer álamos, fresnos y vegetación y se han podido ver peces que subían del Cardener hacia la riera de Rajadell después de décadas en que esto no era posible por el muro que suponía la esclusa de la riera de Rajadell a su paso por Can Poc Oli, la finca donde se encontraba la discoteca.

Huguet recordó que la situación anterior era la de agua encharcada "sin ni un solo pez. Un desierto de vida, porque había un palmo de barro en el cual solo vivía un tipo de gusano que sobrevive en aguas contaminadas".

Cuando el agua empezó a correr, el espacio empezó a cambiar. Esto es el que pasará en el conjunto de este espacio experimental.

Estudios en curso de fauna y los vegetales

Dos aspectos que se consideran cruciales en la operación de renaturalización son la investigación y la divulgación científica.

La investigación se lleva a cabo sobre los vegetales y la fauna como, por ejemplo, pájaros y caracoles, que son buenos indicadores de calidad ambiental.

Alumnado de la Escuela Agraria está realizando un estudio sobre la carga ganadera para calcular cuál sería el pasto necesario para maximizar la biodiversidad.

La visita de centros educativos es otra pata del proyecto, ya sea para que la actuación de renaturalización sea objeto de estudio o para hacer trabajos de campo en un entorno específico.

La medida del área seleccionada permitirá hacer investigación sobre el terreno y comprobar la teoría de la renaturalización en varios hábitats, convirtiendo la zona en una gran aula de educación ambiental al aire libre.

Un proyecto cocinado en Europa

La tendencia a la renaturalización surge a escala europea después de constatar que, a pesar de todos los esfuerzos y medidas de conservación que se han ido adoptando hasta ahora, se está sufriendo una pérdida de biodiversidad importante a escala global.

De hecho, estas obras -que afectan una superficie de poco más de una hectárea y tienen un coste de casi 153.000 euros- está financiado por el fondo europeo Next Generation en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) en el municipio de Manresa.

En ese sentido, el Informe sobre el estado de la naturaleza en Catalunya del año 2020 concluía, entre otros aspectos, que "parece claro que no hay bastante al proteger el que queda, sino que hay que restaurar parte del que se ha perdido".