Salud

Del estrés al impacto en el sueño, el embarazo y el corazón: el efecto del ruido en la salud

La epidemia del ruido se erige en un problema de salud pública: mucho tráfico y hogares no preparados

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Tráfico denso en Comte d'Urgell

Tráfico denso en Comte d'Urgell / Zowy Voeten

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Valga la paradoja, el ruido se ha convertido en una epidemia silenciosa en las ciudades contemporáneas que provoca afectaciones físicas y psicológicas, las cuales, alerta la Organización Mundial de la Salud (OMS), no reciben la atención que merecerían. En Europa, las dos últimas publicaciones de referencia sobre este fenómeno –'Ruido ambiental. Directrices para la Región Europea', de la OMS, y 'Ruido ambiental en Europa', de la Agencia Europea de Medio Ambiente– describen algunos de los principales efectos adversos, más allá del estrictamente auditivo.

Como inicide el informe 'Ruido y salud', del Observatorio Salud y Medio Ambiente, presentado este martes, hoy sabemos que ruidos menos intensos, pero a los que se está sometido de forma continua, como el del tráfico, que además afecta a un porcentaje muy elevado de la población, también se relacionan con numerosas patologías.

Estrés y angustia

Según el informe 'Ruido y salud', del Observatorio Salud y Medio Ambiente, una de las respuestas más frecuentes al ruido son las llamadas "molestias", una reacción de estrés que abarca una amplia gama de sentimientos negativos, incluyendo trastornos, insatisfacción, angustia e irritación. "La respuesta individual al ruido depende no solo de los niveles de exposición, sino también de factores contextuales, situacionales y personales –detalla el estudio– y puede iniciar reacciones fisiológicas de estrés que, si son a largo plazo, podrían desencadenar el desarrollo de enfermedades cardiovasculares".

Perturbaciones en el sueño

Está claro que dormir con ruido fragmenta y reduce la continuidad del sueño, lo que puede tener impactos en el estado de alerta, el rendimiento en el trabajo y la calidad de vida. "La restricción del sueño causa, entre otras cosas, cambios en el metabolismo de la glucosa y la regulación del apetito, deterioro de la consolidación de la memoria y una disfunción en los vasos sanguíneos –se apunta en el estudio–. Los trastornos del sueño a largo plazo también pueden conducir a problemas de salud cardiovascular".

Efectos cardiovasculares y metabólicos 

El ruido, recuerda el estudio del Observatorio de Salud y Medio Ambiente, es un factor de riesgo importante para las enfermedades crónicas. "La exposición al ruido activa las reacciones de estrés en el cuerpo, lo que puede conducir a aumentos de la presión arterial, un cambio en la frecuencia cardiaca y una liberación de hormonas del estrés". El informe también apunta que los efectos cardiovasculares y metabólicos relacionados con la exposición al ruido pueden ser consecuencia de una 

reducción en la calidad del sueño, causada por la exposición al ruido durante la noche, entre otros mecanismos adicionales o interrelacionados. Estos efectos crónicos, incide el informe, pueden conducir a una mortalidad prematura.

Desarrollo cognitivo en los niños

El ruido en las aulas afecta a los niños de distintas maneras, tales como "la reducción de su motivación, de la inteligibilidad del habla, de la comprensión auditiva y la concentración, la generación de molestias y trastornos y el aumento de la inquietud y el nerviosismo", apunta el informe. Como resultado, los niños expuestos al ruido en la escuela pueden experimentar una menor capacidad de lectura, memoria y rendimiento. El deterioro cognitivo, añade el estudio, también podría estar relacionado con la exposición al ruido en casa en las horas nocturnas, lo que puede causar "mal humor, fatiga y deterioro del rendimiento de las tareas al día siguiente". El ruido en casa, añade el estudio, también puede estar relacionado con "problemas de hiperactividad y falta de atención·.

Relación con la tasa de suicidio

Un reciente estudio realizado por investigadores del Swiss Tropical and Public Health Institute, publicado en la revista “Environmental Health”, ha indagado en la relación entre el ruido procedente de varias fuentes de transporte y los casos de suicidio en 5,1 millones de adultos y adolescentes a partir de los 15 años de la Cohorte Nacional Suiza entre 2001 y 2015. La investigación recoge que la exposición al ruido del tráfico en el hogar está vinculada a un mayor riesgo de muerte por suicidio: por cada 

aumento de 10 decibelios –concluye el informe– aumenta un 4 %, mientras que la asociación con el ferrocarril es menos pronunciada. Los resultados se mantienen incluso después de ajustar la exposición a la contaminación atmosférica, la cantidad de zonas verdes cerca del hogar e incluso teniendo en cuenta indicadores socioeconómicos. 

Alteraciones en el embarazo

Una mayor exposición al ruido durante el embarazo también se asocia con un mayor tamaño embrionario, según un estudio en el que ha participado el Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal). La investigación analizó las asociaciones entre la exposición al ruido del tráfico rodado, aeronáutico, ferroviario e industrial, y el crecimiento embrionario y fetal. Cabe decir que los mecanismos por los que esto podría suceder son todavía desconocidos, aunque se ha planteado la hipótesis de que el crecimiento acelerado en el primer trimestre podría ser un mecanismo de supervivencia instantánea del embrión para adaptarse a condiciones adversas.