Tres chicas tuteladas afirman que un hombre les hizo tocamientos y les ofreció dinero a cambio de sexo

La Audiencia de Lleida ha juzgado este miércoles al hombre acusado de abusar sexualmente de cuatro menores tuteladas que vivían en el CRAE, en el Pla d'Urgell. Los supuestos hechos se remontan a 2016, cuando el investigado tenía 72 años, y se habrían alargado hasta 2020. En el juicio, tres de las chicas han declarado que el hombre aprovechaba cuando se las encontraba en un bar de Vilanova de Bellpuig (Pla d'Urgell) para tocarlas en el muslo y el culo y les ofrecía dinero a cambio de besos o sexo. Por su parte, el acusado negó los hechos y aseguró que "nunca" les ofreció nada para obtener sus favores sexuales. El tribunal acordó suspender el juicio por la ausencia de una de las declarantes hasta el 18 de octubre.

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El acusado ha defendido su inocencia durante la declaración que ha ofrecido este miércoles en el juicio celebrado en la Audiencia de Lleida. El hombre ha afirmado que "nunca" hizo tocamientos a las menores del CRAE ni tampoco les ofreció dinero o refrescos a cambio de sexo. "Es mentira", afirmó sobre estas acusaciones, y aseguró también que "nunca me senté a solas con ellas en la terraza del bar", donde las adolescentes relatan que tuvieron lugar los abusos sexuales.

En este sentido, el acusado ha explicado que iba al establecimiento acompañado de sus amigos y normalmente se sentaba en la barra. Una vez allí estaban las menores las "que venían a buscarme para pedirme dinero para dulces. A veces se les daba monedas y otras veces no", ha dicho. El hombre defendió que estas donaciones económicas las hizo "toda la vida, tanto a niños como a niñas", con "los padres delante" y "al descubierto". "¿Por qué tengo que esconderme?", expresó.

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Por su parte, las jóvenes que declararon al juicio relataron diferentes abusos sexuales por parte del acusado. Una de ellas ha explicado que el hombre le hizo tocamientos en el muslo y le forzó a meter la mano en sus genitales por debajo de una de las mesas del bar donde se sentaban. "Flipé y le dije que tenía que marcharme", ha dicho la joven. La misma también ha afirmado que el hombre le dijo que "si le daba un beso me daría el dinero que yo quisiera"

Otra de las chicas ha dicho que el acusado le hizo tocamientos en el muslo y le preguntó también si quería tener "relaciones sexuales" con él, mientras que la otra declarante ha afirmado que el hombre tocó- le "el culo" una vez cuando se levantó de la silla donde se sentaba en el establecimiento de Vilanova de Bellpuig.

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En cuanto a los testigos, el expropietario y una trabajadora del bar en el momento en que se ubican los hechos, han negado ver ninguno de estos sucesos ni comportamiento extraño del acusado durante sus estancias en el bar. También aseguran que no recibieron queja alguna con relación a estos hechos durante el tiempo que trabajaron en el establecimiento. En la misma línea, algunos de los vecinos y exalcaldes del pueblo que prestaron declaración al juicio afirmaron que "nunca" tuvieron ninguna queja del acusado.

Por otra parte, una de las trabajadoras del CRAE que acompañó a una de las jóvenes a denunciar los hechos a los Mossos d'Esquadra ha explicado que desde la dirección del centro se reunieron un par o tres de veces con el acusado para pedirle que cesara sus donaciones económicas a las chicas, pero "no sospechamos que estuviera ligado a temas sexuales".

El tribunal ha acordado aplazar el juicio hasta el próximo 18 de octubre después de que una de las declarantes que estaban citadas por este miércoles no se haya presentado en la sala. La fiscalía considera fundamental su testimonio sobre los hechos con el acusado, al que le pedía de entrada 18 años de cárcel.