La masificación de la montaña dispara los rescates: los Bomberos prevén una cifra récord de 1.300 este año

El medio natural de Catalunya vive un 'boom' de excursionistas. Hay diferentes factores que propician esa masificación de las montañas, como el auge de las carreras deportivas. Pero los expertos señalan una causa mayor: la pandemia del covid, sobre todo el confinamiento, que provocó un cambio en los hábitos de la sociedad. "Si hay más gente, pasan más cosas", esgrime el oficial del Grupo de Actuaciones Especiales (GRAE) de los Bomberos de la Generalitat, Rafel Esteban.

Las estadísticas sustentan su argumento: los rescates en la montaña han aumentado un 40,5% entre 2019 y 2022 y el cuerpo prevé que este 2023 sea de récord: con más de 1.300 servicios. La cifra más alta hasta ahora fue en 2021, con 1.253. De momento, entre enero y julio se han hecho 853 operaciones de salvamento, un 28% más que en el mismo periodo del año anterior. Son solo las cifras de los bomberos catalanes, que desde el 1 de enero pasado ya no incluyen los datos del Vall d'Aran, la comarca donde más servicios se realizan, porque el Govern hizo efectivo el traspaso de las competencias de los servicios de emergencias al aranés. Es decir, que el número total será aún mayor.

Los entresijos de un rescate en alta montaña: tras los pasos de los bomberos del Vall d'Aran [Pub. programada]

"Hay personas muy temerarias desde el covid. Cogen una riñonera y, mal calzadas y sin ropa de abrigo, se van a donde sea. Luego pasan cosas"

Montserrat Romaguera

— Médico de familia

Del aumento de los siniestros en la montaña da fe Montserrat Romaguera, médica de familia y coordinadora del Grupo de Ejercicio Físico de la Societat Catalana de Medicina Familiar i Comunitària (Camfic). La doctora considera que "la mayoría de la población no tiene el hábito de hacer ejercicio físico ni está formada". Además, y por lo que ha visto en su consulta, "hay personas muy temerarias desde el covid. Cogen una riñonera y, mal calzadas y sin ropa de abrigo, se van a donde sea. Luego pasan cosas", subraya.

"No quiero decir que hay más imprudencias porque eso supondría culpabilizar a la ciudadanía"

Rafel Esteban

— Oficial del GRAE de Bomberos

"No quiero decir que hay más imprudencias porque eso supondría culpabilizar a la ciudadanía", afirma por su parte Esteban. "Nuestra función es rescatar y solventar incidentes", remarca en una entrevista a EL PERIÓDICO. En este sentido, indica que el GRAE hace "muchos servicios que se producen de manera casual y esporádica" y rompe una lanza en favor de los montañeros: "Hay que acabar con el mito de que la gente que tiene accidentes en la montaña es rara".

Sin datos de imprudencias, que se pueden cobrar

Los Bomberos no tienen datos de cuántos de estos rescates se deben a una imprudencia o negligencia, ni si fueron leves o graves. "En los últimos años, hemos dirigido los esfuerzos en dar un servicio de calidad. Creo que lo hemos logrado con nota", dice Esteban.

En octubre de 2009 entró en vigor una tasa que cobra los rescates causados por actitudes insensatas. Desde entonces, la Generalitat solo ha reclamado 14 servicios, de los cuales 10 fueron provocados por excursionistas imprudentes en la montaña. No todos han sido abonados y otros han sido estimados parcialmente tras haber sido recurridos. De los 44.760,57 euros que costaron, el Govern ha recuperado 8.072,40.

Los Bomberos no tienen sistematizados datos de cuántos rescates son fruto de imprudencias

Por eso, uno de los retos del GRAE es procesar y analizar toda la información de los rescates: causas, tipología, puntos calientes, etc. "Hasta ahora ese no era el objetivo, pero ahora estamos en un periodo de reflexión y de recogida de datos para saber qué está pasando y poder tomar medidas", señala Esteban.

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Esa tarea es una de las grandes demandas de la Federació d'Entitats Excursionistes de Catalunya (FEEC), que cuenta con más de 43.000 federados. "Sin esta información es muy difícil minimizar los riesgos", defiende el presidente de la entidad, Jordi Moreno.

Preguntado por cuándo se tendrán sistematizados todos esos datos, Esteban no se aventura a marcar una fecha. Eso sí, asegura que entonces el cuerpo de Bomberos "pasará de ser un cuerpo reactivo a uno más proactivo".

Concienciación a la espera de medidas

Mientras eso sucede, tanto el oficial del GRAE como el presidente de la FEEC coinciden en destacar la importancia de "concienciar" a la población de que la montaña comporta un peligro. De esta manera, lanzan una serie de recomendaciones: mirar la previsión meteorológica, llevar suficiente equipamiento y un calzado adecuado y cargar con agua y comida.

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Esteban señala un elemento a tener cuenta. "Al monte hay que llevar más de una herramienta de orientación porque el móvil puede fallar, ya sea porque se quede sin batería o sin cobertura", avisa. Otro consejo es que antes de salir se comunique a alguien la ruta de la travesía del modo más exacto posible. "Así, si pasa algo, podremos actuar más rápidamente", recomienda el oficial.

Los dos expertos advierten de que la preparación física es fundamental para evitar accidentes o, simplemente, episodios de agotamiento físico. Por ello, sugieren a los excursionistas que se marquen "metas realistas". De lo contrario, los accidentes seguirán al alza.

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A más rescates, más recursos, tanto humanos como logísticos. El pasado enero, el GRAE estrenó una cuarta sede profesional en Valls (Tarragona), que se suma a las de La Seu d'Urgell (Lleida), Olot (Girona) y Cerdanyola del Vallès (Barcelona) para cubrir todo el territorio catalán.

El grupo de rescatistas también dispone de dos helicópteros todos los días del año y las 24 horas del día, además de un tercero durante las temporadas altas (verano, invierno y algunos fines de semana). "En días puntuales podemos llegar a tener algún servicio en cola, pero no más y en ningún caso de gravedad", zanja.