Nuevos destinos

"Es horrible abrasarte de calor en vacaciones": la crisis climática acelera el turismo hacia destinos templados

Las olas de calor amenazan el atractivo turístico de países como España

Turismo: el cambio climático alargará la temporada alta a casi todo el año

Silvana Antonelli

Silvana Antonelli / Zowy Voeten

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Vacaciones y calor han ido tradicionalmente de la mano, pero la crisis climática está erosionando la que parecía una inquebrantable alianza. Las altas temperaturas y las condiciones climáticas extremas que se están viviendo en el sur de Europa instan a los turistas, tanto en España como en el extranjero, a cambiar su destino y planear vacaciones más refrescantes. Visitar el Sur o el Mediterráneo mejor fuera de la temporada canicular. En cambio, destinos como Irlanda o Escocia cotizan al alza en el mercado vacacional. 

Una encuesta de la Comisión Europea de Turismo apunta a que un 10% menos de turistas están dispuestos a viajar en verano al Mediterráneo

“Mi primera opción era visitar Sicilia”, admite Carlos Albaladejo, joven de 21 años de La Garriga. “Quería ir allí a hacer rutas, pero nos lo empezamos a replantear por las altas temperaturas. Me di cuenta de que no podríamos caminar en las horas de sol ni de máximo calor, y entonces perderíamos mucho tiempo”, añade. “Ya teníamos casi decidido cambiar de destino cuando apareció la noticia de que habían desalojado a 1.500 personas por incendios forestales. Se lo envié a mi amiga y tuvimos claro que debíamos cambiar de vacaciones”, relata. “Como queríamos un sitio que estuviera bien, fresquito y cerca del mar, nos vamos a Irlanda”.

Carlos Albaladejo, en la estación de la Garriga, viaja a Irlanda estas vacaciones.

Carlos Albaladejo, en la estación de la Garriga, viaja a Irlanda estas vacaciones. / Jordi Cotrina

Evitar el sur

Carlos no es el único que busca destinos más frescos para sus días de descanso. La Comisión Europea de Turismo (ETC, en inglés) ha publicado una encuesta con datos turísticos de 10 países que apunta a que destinos como Irlanda, Dinamarca, Bulgaria y República Checa están aumentando en popularidad. En cambio, respecto al año pasado, un 10% menos de turistas europeos están dispuestos a viajar en verano al Mediterráneo. De hecho, el 7,6% de los viajeros ya están preocupados por las “condiciones climáticas extremas", factor que consideran como un motivo de intranquilidad para sus viajes. "Está claro que durante las olas de calor muchos turistas prefieren evitar destinaciones del sur", afirma Shane Bradley, miembro de este observatorio turístico. La agencia de calificación Moody's también ha advertido en una nota que las olas de calor pueden "reducir el atractivo del sur de Europa".

Estudios apuntan a que un mayor número de visitantes se disponen a viajar al sur de Europa fuera de la temporada canicular 

Es indudable que el calor, los cambios de temperatura y los episodios extremos como tormentas, inundaciones o incendios se están convirtiendo, desgraciadamente, en la nueva normalidad climática. ETC advierte de que industria turística depende "de patrones predecibles de tiempo, así que el éxito futuro de cualquier destinación irá muy relacionada con la capacidad de los países de mitigar los efectos del cambio climático y potenciar el turismo".  

Al sur, en otoño y primavera

Sin embargo, no todo son malos vaticinios en el sur de Europa. Bradley apunta a un incremento de los visitantes (más de un 5%) que deciden viajar al sur fuera de la temporada canicular. "Si esta tendencia continúa, podremos ver más turistas en primavera y otoño. Esto puede tener un efecto beneficioso en la economía local, ya que extiende los flujos del turismo y el verano", añade esta especialista. 

Lourdes Martín, desde Navarra.

Lourdes Martín, desde Navarra. / El Periódico

Más allá de eso, David Mendoza, joven de Gavà de 26 años, también ha optado por dar esquinazo a sofocos y golpes de calor y ha elegido Irlanda para ir de vacaciones. “El factor temperatura fue importante a la hora de escoger destino”, coincide David. “Aunque lo que nos ha llamado más la atención han sido los paisajes, porque siempre vamos hacia el norte”. Para él, escoger destinos fríos no es exclusivo de este año. “Lo más al sur que hemos estado es el norte de España. Si vas a Andalucía en verano lo pasas mal, es imposible aprovechar el día. Si quieres ver algo después de comer, sufres el riesgo de pasarlo mal o que te suceda algo”. 

"Nos vamos a Navarra"

Aun así, España sigue siendo el destino más popular entre los europeos: lo eligen el 8% de los turistas de Europa, por delante de Francia (7%) e Italia (7%). Eso sí, decidirse por el norte de la Península antes que el sur es una apuesta asegurada entre los desafectos del calor. Lourdes Martín, profesora de primaria, acaba de reservar sus vacaciones: “Nos vamos a Navarra”. En la última ola de calor, se decidieron por un destino frío para poder aprovechar más el viaje. “Nos gustaría ir a Granada, porque allí tenemos familia, pero el calor agota mucho y te limita si tienes ganas de salir, caminar y visitar lugares. En las horas del mediodía no puedes hacer nada”. Ella lo tiene claro: en verano, al norte. “Se está más fresco, tienes más horas para hacer actividades y por las noches descansas más".

Lourdes y David no son los únicos que deciden no visitar Andalucía por las temperaturas. Txell de Jaumar y su familia tampoco lo ven viable. “Nos gustaría bajar a lugares como Málaga o Sevilla, pero mi madre es profesora  y solo tiene vacaciones en verano, y en esta época es inviable". “El factor temperatura lo tenemos presente a la hora de viajar, y más ahora. Ya nos hemos abrasado alguna vez con olas de calor y ha sido horrible”, añade.

Climatizador natural

Con doble nacionalidad, Silvana Antonelli vive cada verano las dos caras de la moneda. Primero viaja a Italia para visitar a su familia paterna, y luego se desplaza a Escocia, donde la espera la familia de su madre. Aunque se describe como una persona de “calor y playa”, reconoce que lo mejor para revitalizarse es el frío. “Agradezco muchísimo esta pausa de frío. Aquí estás cada día a 30-35ºC y, de repente, te escapas a un sitio con temperaturas alrededor de los 15ºC”, explica.

Bajas del avión y es como si te diera el aire acondicionado en la cara, te reactiva, te da energía. Tengo mucha suerte de poder hacer esto cada año”, añade. Reconoce que, aunque sus vacaciones ideales son en destinos cálidos, las temperaturas elevadas de Italia la acaban enclaustrando en casa. “Se está incluso peor que en Barcelona, no estás bien en ninguna pare, ni dentro ni fuera”, describe.

Suscríbete para seguir leyendo