Audiencia de Girona

La acusación particular pide prisión provisional para el profesor de batería de Quart acusado de abusos sexuales

La fiscal considera que el riesgo de fuga está neutralizado por haber comparecido el procesado siempre que lo han requerido

AUDIENCIA de girona

AUDIENCIA de girona / ACN

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La acusación particular ha pedido el ingreso en prisión por riesgo de fuga del profesor de batería de Quart (Girona) acusado de abusar sexualmente de cinco alumnos de entre 10 y 22 años, para quien fiscalía solicita 43 años de cárcel, y cuyo juicio se ha suspendido por la huelga de letrados.

En la vista que se ha celebrado este martes en la sección tercera de la Audiencia de Girona, el abogado de las víctimas, Benet Salellas, ha realizado esa requisitoria, a la que fiscal y defensa, esta última en manos del abogado Carles Monguilod, se han opuesto, aunque aceptarían comparecencias periódicas.

Juicio aplazado

El caso debía juzgarse la semana pasada, pero se suspendió por la huelga que están llevando a cabo los Letrados de la Administración de Justicia (LAJ) y se ha vuelto a señalar para el próximo septiembre.

Ante esta nueva situación, Benet Salellas solicitó la celebración de esta vista de medidas cautelares para pedir el ingreso en prisión con el argumento de que el acusado se ha "despatrimonializado" dando sus propiedades a su exmujer y que, sumado a la elevada pena a que se enfrenta, supone un riesgo de fuga.

Para Salellas, la cuestión que debe valorar la Sala es "hasta qué punto puede asumir el riesgo este tribunal de que el acusado, que a día de hoy no tiene relación con la pareja ni con la familia ni vínculo patrimonial ni trabajo alguno" y con peticiones de más de 40 años de cárcel por parte de diez víctimas, "no comparezca".

Así, entre estos argumentos en los que se ha basado la acusación está la "despatrimonialización" a raíz del acuerdo de divorcio del procesado con su exmujer.

"Se ha quitado de encima tres propiedades inmobiliarias que estaban a su nombre y esta despatrimonialización es un dato objetivo y que nos lleva a entender que se han modificado las circunstancias relacionadas con el riesgo de fuga", ha manifestado.

Para Salellas, si a esto se le suma que no consta que tenga trabajo, que se enfrenta a penas elevadas y que no hay señalada nueva fecha de juicio, "podría intentar evadirse de la acción de la justicia".

También ha basado su petición de prisión en que, en esta causa, ha habido un proceso de "cristalización progresiva", al comenzar con una denuncia a la que se fueron sumando las demás.

"El acusado ha tenido la suerte de no haber sido imputado inicialmente por las cinco denuncias que ahora son objeto de acusación, porque si no las partes acusadoras habríamos pedido la adopción de la prisión incondicional antes", ha asegurado.

Respuesta de la fiscal

En su turno, la fiscal ha admitido que es cierto que la condena potencial a la que se enfrenta es muy elevada, pero ha considerado que el riesgo de fuga está neutralizado por haber comparecido el procesado siempre que lo han requerido, también antes de la primera fecha señalada para el juicio y después cancelada por la huelga.

Sobre la despatrimonalización, ha argumentado que, a pesar de haber dado todos sus bienes a su ex mujer, el convenio de divorcio recoge que ella asumirá el pago de las indemnizaciones en caso de condena.

Por su parte, Carles Monguilod, que ha apuntado que, en enero, el acusado consignó 50.000 euros para hacer frente a la posible responsabilidad civil, ha sostenido que no es cierto que su cliente no tenga relación con la familia y ha manifestado que el divorcio es consecuencia de la "campaña de acoso" que vive el procesado.

"Ha sido literalmente asediado mediática y personalmente, perseguido y eso provocó un problema irresoluble a nivel familiar, le llevó a romper la relación con su esposa, porque el acoso que sufre minó la convivencia familiar e hizo la donación de todos sus bienes a la exmujer en un acto de generosidad", ha afirmado.

En cuanto a la pena de prisión a la que se enfrenta el procesado, Monguilod ha indicado que, aunque la fiscal pida 43 años y la acusación particular 48, "el cumplimiento efectivo según marca la ley sería el triple de la pena más alta entre los delitos por el que pudieran condenarlo".

Además, ha recordado que su defendido niega los hechos y que espera que la causa acabe en sentencia absolutoria y así "todo esto habrá sido una pesadilla y nada más que una pesadilla".

El tribunal ha dado la palabra al acusado al finalizar la vista y éste ha preferido no manifestarse. Asimismo, la Sala resolverá la petición de la acusación particular en los próximos días.

Modus operandi

Este profesor de batería, según las acusaciones, primero se ganaba la confianza de sus alumnos, niños o jóvenes, empezaba a interesarse por su vida sexual, les hacía comentarios lascivos y, después, pasaba a darles masajes o les enseñaba videos pornográficos para acabar en tocamientos, masturbaciones o felaciones.