Alella estrena su caldera sostenible: "La ciudadanía tiene conciencia climática"

El complejo municipal de deportes y el polideportivo Abelardo Vera de Alella (Maresme) ya cuenta con una caldera de biomasa que no solo supondrá un ahorro de 30.000 euros anuales al ayuntamiento, sino que también ayudará a reducir considerablemente el impacto ecológico que generan las instalaciones.

"Realizar este proyecto se había convertido en una necesidad, porque la ciudadanía tiene conciencia climática", ha afirmado el alcalde de Alella, Marc Almendro, quien también ha revindicado la importancia de toda la actividad que se genera: "El complejo deportivo tiene más de 3.000 personas abonadas, y el pabellón acoge a tres clubes deportivos además de la propia actividad municipal de iniciación deportiva".

La instalación de esta caldera de biomasa forma parte del proyecto "Biomassa pel clima" impulsado por la Diputación de Barcelona, que contempla la implantación de 14 calderas de biomasa en 14 municipios distintos de la provincia de Barcelona con el objetivo de avanzar hacia una economía más limpia y sostenible. Se busca dar apoyo a los ayuntamientos con pocos recursos -entre ellos Alella, como ha reconocido el alcalde Almendro- para que puedan reducir su impacto energético, rebajar las emisiones de CO² y al mismo tiempo aliviar las arcas municipales.

Xesco Gomar, presidente delegado de acción climática, ha explicado que la caldera de Alella ha sido la decimocuarta y última del proyecto. Y ha insistido en los múltiples beneficios más allá del ahorro energético y económico. Ha citado, por ejemplo, la mejora de la gestión de los bosques de los alrededores. La caldera de biomasa garantiza la producción de astilla forestal de km0, generando así más biodiversidad en los alrededores así como un recurso para la prevención de incendios "Es en invierno cuando hay que evitarlos", recuerda Gomar.

También ha recalcado que 'Biomassa pel clima' forma parte de 'Renovables 2030', un proyecto a gran escala que financia la Diputación conjuntamente con el fondo de inversión FEDER, que supone "el primer plan de implantación masiva de energías renovables en Catalunya" y que supone un efecto positivo en la lucha contra el cambio climático y contra la huella ecológica. "El impacto de este proyecto es como sacar 50.000 coches de la vía pública", ha reivindicado.

Alella es el último de los municipios que han sido incluidos en este proyecto de calderas de biomasa. Los otros 13 son Argentona, Balenyà, Caldes de Montbui, Figaró-Montmany, L'Atmetlla del Vallés, Monistrol de Calders, Navàs, Olost, Sant Fruitós de Bages, Sant Martí Sarroca, Sant Pere de Vilamajor, Santa Margarida de Montbui y Vilassar de Dalt.

"Para la ciudadanía es una urgencia tomar medidas en pro de la sostenibilidad. Es importante que las personas sientan que su actividad también es parte de esta revolución verde", ha concluido Marc Almendro.