Protección animal

Cómo criar una mascota exótica de forma legal y sin problemas

Varias oenegés animalistas lanzan un proyecto para delimitar qué especies se pueden tener en casa y cuáles no

La guacamaya roja tiene el promedio de vida más largo de cualquier loro, viviendo alrededor de 30 años.

La guacamaya roja tiene el promedio de vida más largo de cualquier loro, viviendo alrededor de 30 años.

El Periódico

El Periódico

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Cada vez son más los ciudadanos que se animan a criar en casa animales exóticos como guacamayos, ocelotes o mofetas. Sin embargo, la tenencia de estas especies, muchas de ellas invasoras, tiene consecuencias que afectan a la biodiversidad, la salud pública e incluso a la seguridad ciudadana.

Con el objetivo de limitar el comercio ilegal de este tipo de mascotas y mejorar su cuidado, varias organizaciones animalistas acaban de crear la Coalición para el Listado Positivo, un proyecto que persigue definir "qué especies se pueden tener en casa y cuáles no", según Alberto Díez, director de la Asociación Nacional para la Defensa de los Animales (ANDA), una de las entidades patrocinadoras de este plan, junto a la Fundación para el Asesoramiento y Acción en Defensa de los Animales (FAADA) y la asociación APP Primadomus para la protección y la defensa animal.

Listados negativos

El marco de protección a las especies exóticas presenta en este momento graves carencias, ya que, si bien existen listados negativos de animales, en opinión de Díez "están siendo poco eficaces a la hora de ser aplicados" puesto que "son más largos y van siempre un paso por detrás". Según este activista animalista, "es más sencillo elaborar un listado con las especies que sí podemos tener en casa".

El proyecto propone que sea un comité científico quien decida las especies que se incluirán en esta lista en función de diversas características, como el peligro que pueden representar como animales, su capacidad para transmitir enfermedades o la facilidad para invadir y colonizar el entorno natural.

Pero los promotores de este plan advierten que, con anterioridad a la publicación de esa lista, el propietario que tenga un animal de una especie que sea prohibida, "podrá conservarlo en casa hasta que se muera de viejo".

Según Marta Merchán, directora de APP Primadomus, esta iniciativa es similar a otras propuesta que funcionan en países europeos como Bélgica y tiene "un enfoque preventivo" que aborda todos los problemas generados por los exóticos "desde una única herramienta" y permite defender mejor los derechos de los animales.

Día internacional

La Coalición para el Listado Positivo pretende dar visibilidad al mensaje de las asociaciones animalistas y conservacionistas, que celebran cada 10 de diciembre, desde 1997, el Día Internacional de los Derechos de los Animales.

En el caso de APP Primadomus, sus instalaciones albergan entre 130 y 150 mamíferos exóticos, como primates y felinos, que proceden en su mayoría de circos, donde habían sido usados como piezas de entretenimiento, pero también de la tenencia particular y del tráfico ilegal. Liberar estos animales tendría graves consecuencias, porque, según advierte Merchán, "si terminan en la Naturaleza y se adaptan, pueden convertirse en especies invasoras".

Otro centro de recogida de estas especies es Ave Fénix, hasta donde llegan multitud de aves por diversos motivos. "A menudo los abandona sus dueños porque los compran cuando los pájaros son pequeñitos y, al crecer, ya no les hace gracia, les molestan los gritos, ensucian y tienen un mantenimiento caro", según explica Gladys Freginals, directora de esta entidad, quien reconoce que a veces también son abandonados por "separaciones matrimoniales".

Patadas en jaulas

Esta organización cuida actualmente de 337 aves de 32 especies diferentes, "una cifra bestial, porque no recibimos ayudas", según advierte esta voluntaria, quien recuerda que muchos de ellos llegan con problemas "ya que les pegan patadas en las jaulas para que se callen o vienen sin plumas debido al estrés y la mala alimentación".

Freginals señala que a menudo es difícil encontrar un hogar adecuado para las de mediano o gran tamaño, pues la mayoría de propietarios "no reúne las condiciones necesarias que necesita el animal".

Los responsables de Ave Fénix y APP Primadomus, coinciden en que una de las principales complicaciones es el desconocimiento previo de los ciudadanos a la hora de adquirir un animal exótico, ya que "no suelen conocer ni los problemas ni el mantenimiento que suponen".